Los sindicatos defienden la moderación de los salarios, pero con cláusulas revisión
CCOO y UGT defenderán en la negociación del nuevo Acuerdo de Negociación Colectiva para 2003 un avance moderado de los salarios, con el objetivo de reducir la inflación y mejorar la competitividad empresarial, pero rechazarán cualquier propuesta de la patronal para suprimir las cláusulas de revisión. Así lo anunciaron hoy los secretarios generales de CCOO y UGT, José María Fidalgo y Cándido Méncez, respectivamente, en la presentación de sus propuestas para el nuevo acuerdo, que comenzará a negociarse el próximo lunes entre estos sindicatos y las patronales CEOE y CEPYME, con el objetivo de firmarlo a finales de enero de 2003.
Méndez ha resaltado que los sindicatos estarán "totalmente en contra" de la supresión de la cláusula de revisión salarial, y ha apuntado que quienes proponen esta medida "son personas e instituciones ancladas en el pasado". Fidalgo ha comentado que las propuestas salariales de los sindicatos también estarán encaminadas a mejorar la dotación tecnológica, la innovación en la organización del trabajo, y la formación de los empleados, así como a establecer una normativa de retribución variable que permita una individualización "regulada, y no arbitraria", de los salarios.
Méndez ha indicado que la importancia de la negociación del acuerdo para 2003 estriba en que la nueva normativa afectará a unos seis millones de trabajadores, el 65% del total, a través de 3.700 convenios colectivos, cuando el actual documento en vigor tan sólo implica al 40% de los empleados españoles. CCOO y UGT también tratarán de orientar el Acuerdo de Negociación Colectiva para 2003 hacia un mayor crecimiento, calidad y estabilidad del mercado de trabajo "en cada empresa y en cada sector", todo ello con un aumento de la seguridad y de la salud laboral.
Asimismo, Méndez ha adelantado que los sindicatos también defenderán en las negociaciones la constitución de un observatorio para el empleo de carácter nacional e intersectorial, que serviría para estudiar y analizar las necesidades de la economía y del mercado de trabajo. Otra de las demandas sindicales aboga, según ha explicado Fidalgo, por incrementar la flexibilidad interna de las empresas para evitar ajustes traumáticos, lo que implicaría negociar la duración de la jornada laboral.
Fidalgo ha resumido que las propuestas de los sindicatos tratan de ayudar a reducir la inflación y a mejorar la competitividad de las empresas españolas, objetivos que, en su opinión, no deben cumplirse con el recorte de los derechos de los trabajadores y de las percepciones salariales.