El FMI alaba y respalda los planes económicos del Gobierno turco
El director europeo del Fondo Monetario Internacional (FMI), Michael Deppler, ensalzó ayer las principales líneas del programa económico del nuevo Gobierno de Turquía, lo que allana el camino para el desembolso del tramo pendiente del acuerdo de 16.000 millones de dólares (una cantidad similar en euros) actualmente en vigor.
Deppler también se congratuló de llevar ahora a cabo las negociaciones con un solo partido de Gobierno, como decidieron las urnas el pasado 3 de noviembre, en lugar de la tensa coalición que formaba el anterior Gobierno presidido por Bulent Ecevit.
'Las políticas de este Gobierno, sus intenciones, son muy fuertes y mucho más en línea con lo que nosotros podemos apoyar', dijo el alto cargo del Fondo tras una visita de dos días al país.
A su juicio, Turquía supera ya muchos de los criterios macroeconómicos recogidos en el pacto, como la inflación, inferior al 35% fijado, y el crecimiento por encima de los objetivos.
No obstante, Turquía continúa sistemáticamente incumpliendo las metas de privatización y de reforma del sector bancario, teóricamente prioritarias para el organismo. El Ejército, con gran poder sobre el Ejecutivo, ha venido rechazando los planes que Ecevit diseñó para la liberalización del sector de telecomunicaciones. Asimismo, la justicia ha suspendido la intervención del banco Pamukbank por parte de la agencia estatal para la reforma bancaria, lo que desestabilizó a los mercados financieros y arrojó dudas sobre la verdadera voluntad de las autoridades para mantener la independencia de los organismos reguladores.
Para Deppler, la cuestión bancaria 'es un asunto muy importante que va avanzando' e insistió en que 'es muy importante para Turquía tener un sistema bancario sólido', dijo. Una misión del organismo llegará a Ankara el próximo lunes para revisar todo el programa de asistencia financiera firmado en febrero y aprobar, si procede, el último desembolso pendiente del plan de ayuda.
No más ayuda
Para Deppler, no hay necesidad inmediata de aumentar el actual programa de asistencia con nuevos créditos, dado que la caída de la inflación y la rebaja de los tipos de interés han abaratado el peso del coste de la deuda para el nuevo Gobierno. 'Espero que si no sucede ningún imprevisto podamos firmar el acuerdo en 5 o 6 semanas', dijo.
Turquía recibiría, así, 1.600 millones de dólares pendientes.