Deutsche Telekom ingresa 610 millones al vender el 8,2% de T-Online
La fuerte deuda que arrastra el gigante de las telecomunicaciones europeo Deutsche Telekom (unos 64.000 millones de euros) ha sido el motivo que ha llevado al grupo alemán a desprenderse de 100 millones de acciones de su filial de Internet T-Online. La compañía sacó ayer al mercado este paquete, que fue vendido en pocas horas y a inversores institucionales a un precio de 6,10 euros por título.
Los 610 millones de euros que Deustche Telekom ha obtenido con la operación servirán para reducir la abultada deuda de la operadora alemana. Deutsche Telekom reduce así su participación del 81,7% al 73,5% y se compromete, 'en la situación actual', a no sacar a Bolsa más acciones de la filial de Internet durante los próximos tres meses, así como a no reducir su porcentaje en ella por debajo del 51%.
Tras la venta de estos títulos, el capital flotante de la subsidiaria de Deutsche Telekom pasará del 10,4% al 18,6%. Estos porcentajes de capital no tienen en cuenta el eventual ejercicio de una opción de sobresuscripción de 20 millones de títulos de T-Online.
Si hubiera demanda para ello, la operadora alemana se desprendería de estas acciones al mismo precio que ofreció ayer, es decir, 6,10 euros por título. Esta opción, no obstante, aún está pendiente de decisión, según confirmó un portavoz de la compañía.
Deutsche Telekom explicó que gracias a esta operación, la base de los accionistas de su filial de Internet se ampliará y la liquidez de los títulos será más elevada, lo que aumentará el atractivo del valor ante posibles inversores. La reducción de la elevada deuda que pesa sobre el primer grupo europeo de telecomunicaciones es uno de los principales objetivos de Kai-Uwe Ricke, nuevo presidente del grupo desde mediados de noviembre.
Ricke se ha marcado como meta recortar la deuda hasta 52.300 millones de euros hasta finales de 2003.
Para alcanzar este reto serán fundamentales los ingresos que la empresa espera obtener con la venta de parte de su red de cable y bienes inmobiliarios, entre otros activos. Sólo la desinversión en la división de cable podría suponer para la matriz unos ingresos de unos 2.300 millones de euros, según señaló hace un mes del director financiero, Karl-Gerhard Eick.
No obstante, esta valoración fue considerada excesiva por el diario económico Handelsblatt que la semana pasada calculaba entre 1.800 y 2.000 millones de euros lo que el grupo podría obtener por estos activos.
T-Online, que entre enero y septiembre de este año ha perdido 271,7 millones de euros, tiene 11,8 millones de clientes en toda Europa. De ellos, alrededor de un millón están en España -donde su filial es Ya.com, que compró a Jazztel- y Francia.
Los mercados celebraron la operación con alzas durante toda la jornada. Tanto los títulos de Deutsche Telekom como los de su filial T-Online lograron importantes ganancias. La primera registró una subida del 2,62% y cerró a 12,55 euros, mientras que T-Online llegó hasta 6,45 después de subir un 4,88%.