De Palacio consideraría 'un honor' volver al Gobierno con el sucesor de Aznar
La vicepresidenta de la Comisión Europea y responsable de Energía y Transporte, Loyola de Palacio, se mostró ayer convencida de que cualquiera de los tres nombres que se manejan en la actualidad como futuros sucesores de José María Aznar (Mariano Rajoy, Jaime Mayor Oreja y Rodrigo Rato) 'será una excelente elección por parte del Partido Popular'.
Durante un almuerzo-conferencia organizado por el Foro de Nueva Economía, la comisaria europea aseguró 'que sería un honor que cualquiera de ellos', de llegar a tener la responsabilidad de formar gobierno, le ofreciera una vicepresidencia.
No obstante, De Palacio eludió pronunciarse sobre su favorito y ni siquiera hizo un comentario sobre la posibilidad de que el sucesor sea una mujer, tal y como ha apuntado en alguna ocasión el propio presidente del Gobierno, José María Aznar. De hecho, en las quinielas que contienen nombres femeninos el suyo es el que más ha sonado tradicionalmente. La comisaria europea aseguró que 'como en los grandes equipos de fútbol, lo bueno del Partido Popular es que tenemos un gran banquillo'. Desde el PP, por su parte, se insiste en que el debate sobre la sucesión de Aznar no se abrirá hasta el otoño de 2003.
Loyola de Palacio también se refirió a la posibilidad de que el presidente del Gobierno sea el próximo responsable de la Comisión Europea, en sustitución de Romano Prodi, y afirmó que 'deberán preguntarle a José María Aznar, qué es lo que quiere ser'. 'Yo sólo les puedo decir que Aznar y España, como Estado miembro de los Quince, gozan de un gran prestigio europeo por haber sido uno de los países que, con el entorno económico actual, mejor están soportando el clima de desaceleración y registran un crecimiento económico más elevado, ya que han sido capaces de poner en marcha las reformas estructurales necesarias', añadió.
Por último, De Palacio recordó al lendakari, Juan José Ibarretxe, que 'falta a la verdad' cuando dice que el nuevo estatus que plantea para Euskadi ya existe en el Tratado de la Unión Europea.