_
_
_
_
Armonización

Bruselas acepta que Suiza conserve el secreto bancario si aplica retenciones

La Comisión ha logrado que Suiza acepte someter los rendimientos del ahorro de los ciudadanos comunitarios a una retención de hasta el 35% y remitir ese gravamen, descontando una pequeña comisión de gastos de gestión, a la hacienda correspondiente. Berna se muestra dispuesta además a concluir acuerdos bilaterales con cada Estado de la UE para colaborar en casos de fraude fiscal (que no evasión) o conductas del contribuyente que en dicho estado merezcan una calificación similar.

Pero Suiza se muestra inflexible en cuanto a la petición de Bruselas en favor de un 'intercambio automático de información' entre sus autoridades fiscales y las de la UE. Berna considera que vulneraría sus normas sobre el secreto bancario y el derecho a la confidencialidad del depositario que garantiza la legislación helvética.

La Comisión Europea considera que existe 'una base para el acuerdo con Suiza' a condición de que clarifique su oferta de intercambio parcial de información. Pero el veredicto final corresponde a los ministros de Economía de la UE que a finales del año 2000 condicionaron su apoyo unánime a la directiva sobre fiscalidad del ahorro a un acuerdo con terceros países para aplicar 'medidas equivalentes' a las previstas en la norma europea.

La condición obedeció al deseo expreso de Luxemburgo, Bélgica y Austria, cuyo secreto bancario está condenado a desaparecer siete años después de que entre en vigor la directiva (en principio, el próximo 1 de enero de 2003). El quid de la cuestión estriba ahora en la definición de 'equivalente'.

La directiva sobre fiscalidad del ahorro pretende acabar con los refugios fiscales dentro de la Unión Europea y lograr que 'cada ciudadano pague los impuestos que le correspondan'.

Reino Unido convenció al resto de socios comunitarios de que ese objetivo sólo se puede conseguir levantando el secreto bancario para que las haciendas nacionales puedan conocer en todo momento el patrimonio que sus contribuyentes mantienen en otro Estado miembro.

Energía

Tras medio año de tensas negociaciones para obtener de Suiza un compromiso similar, durante el que se ha llegado a amenazas de represalias comerciales por parte de la UE, el comisario europeo de Fiscalidad, Frits Bolkestein, presenta hoy su cuenta de resultados. Fuentes diplomáticas no descartan que la decisión final de los ministros deba esperar aún a otro Consejo de ministros, que podría celebrarse en torno a la próxima cumbre de primeros ministros en Copenhague (12 y 13 de diciembre).

El consejo de Ministros de Economía también abordará hoy el espinoso expediente de la armonización fiscal de la energía, que pretende elevar los tipos mínimos de imposición sobre gasolinas, gasóleo, gas natural y butano (congelados desde 1992) e instaurar por primera vez unos tipos mínimos para el consumo de electricidad en los hogares y las empresas.

España bloqueó durante casi cuatro años la iniciativa, pero ofreció levantar el veto a cambio de nuevos avances en la liberalización de los mercados energéticos. El pasado mes, los Quince pactaron finalmente la apertura total de los mercados a partir de julio de 2007.

España pide un periodo transitorio hasta el 1 de enero de 2007 para incrementar la fiscalidad del gasóleo hasta 302 por cada 1.000 litros (desde los 293,86 euros actuales), y hasta el 1 de enero de 2012 para llegar a los 330 euros. España espera obtener también un trato especial para el gasóleo profesional (hasta 2012).

Más información

Archivado En

_
_