Los obispos defienden la Constitución frente al nacionalismo totalitario
La Conferencia Episcopal aprobó ayer una 'instrucción pastoral' en la que defiende la Constitución como 'marco ineludible de convivencia' y censura el 'nacionalismo totalitario, matriz del terrorismo de ETA'. El texto obtuvo 63 votos a favor, ocho en contra y cinco abstenciones.
La parte del documento más debatida, y la que tuvo más votos en contra, consta precisamente bajo el capítulo 'el nacionalismo totalitario, matriz del terrorismo de ETA'. En ella se mantiene que 'resulta moralmente inaceptable que las naciones pretendan unilateralmente una configuración política de la propia realidad y, en concreto, la reclamación de la independencia en virtud de su sola voluntad'. 'No es moral', añade el documento aprobado, 'cualquier modo de propugnar la independencia de cualquier grupo y la creación de un nuevo Estado...'.
Para la mayoría de los obispos, la 'opción nacionalista, como cualquier otra opción política, no puede ser absoluta', pues para ser legítima 'debe mantenerse en los límites de la moral y la Justicia'.
En el documento se añade que 'la doctrina social de la Iglesia reconoce un derecho real y originario de autodeterminación política en el caso de una colonización o de una invasión injusta, pero no en el de una secesión'.
El portavoz de la Conferencia Episcopal, Juan José Asenjo, señaló que 'sería una temeridad' que los obispos en desacuerdo con el documento no aceptaran su contenido y 'el sentir de la mayoría'.