Garnacha tinta, la aragonesa internacional
Sus orígenes. La mayoría de la información recabada sobre el origen de esta variedad apunta hacia España como patria madre. Se considera que es originaria de Aragón, concretamente de la provincia de Zaragoza.
Su historia. Desde Zaragoza, la garnacha tinta se extendió paulatinamente a las regiones limítrofes, implantándose a lo largo del tiempo por toda la península. Más tarde, cruzó los Pirineos para instalarse en el sur de Francia y hoy se encuentra representada en muchos países vitícolas del mundo.
Su nombre. Se especula que su nombre procede del color granate de los vinos que genera. También se conoce como Alicante, Aragón, Tintorera o Grenache (Francia).
Su localización. La variedad garnacha ocupa un privilegiado segundo puesto en el ranking de superficie total de viñedo de España, con un 14%, estando también entre las uvas más cultivadas en el ámbito internacional (casi un 4 % de la plantación mundial). En España encontramos cultivos de garnacha en casi todas las denominaciones de origen, especialmente extendida en Aragón, Cataluña, Extremadura, Madrid, Méntrida, Navarra y Rioja. Está presente en todas las zonas de cultivo mediterráneas de la vecina Francia, así como en las islas de Córcega, Cerdeña y Sicilia. En el Nuevo Mundo, la garnacha ha sorprendido por su buena adaptación.
Esta variedad es una de las responsables de las notas minerales de los vinos del Priorat, de los prestigiosos tintos franceses de Châteauneuf-du-Pape o los dulces naturales de Banyuls, reforzando también el esqueleto de numerosos tintos de La Rioja y de Navarra. Nuevas experiencias están demostrando que se pueden elaborar varietales tintos con esta uva destinados a envejecer en roble con magníficos resultados.
La cepa. Variedad tinta de porte erguido, con sarmientos finos y frágiles, muy rústica y resistente a la sequía, lo que ha posibilitado su magnífica adaptación en zonas con problemas de sequedad y calor. Sensible al mildiu y a la botrytis, es una cepa de brotación y maduración tardía.
El vino. Con ella se obtienen vinos de buena graduación alcohólica, de atractivo color granate y de acidez moderada. A veces presentan aspereza. Son vinos que envejecen con rapidez y con bastante sensibilidad a la oxidación, lo que dificulta una crianza prolongada. Elaborados como rosados da lugar a vinos frescos, aromáticos, de bello color y gran frutosidad, tan apreciados y famosos como los rosados navarros.
Maridaje. Esta uva tinta puede combinar a través de sus frutales rosados con pastas, arroces y pescados, con sus tintos jóvenes con carnes blancas y aves y con joyas como los vinos de Priorat con caza o platos de gran complejidad.
Castillo de San Diego. Blanco. Cosecha 2001
Antonio Barbadillo, fundada en 1821, es propietaria de 500 hectáreas de viñedos situados en la zona del Jerez Superior. Su vino Castillo de San Diego es un monovarietal de palomino fino obtenido en mosto de yema de uvas criadas en albariza superior y fermentado a baja temperatura. En cata presenta un color amarillo pajizo con reflejos dorados, muy limpio y brillante. Aromas de buena intensidad limpios, con tonos florales y recuerdos de hierba fresca en boca, es suave, ligero, con fácil paso de boca y un retrogusto de buena persistencia donde salen notas frutosas y un ligero amargor que le da personalidad. Perfecto acompañante de platos de pescado tanto en frituras como en calderetas. Bodega: Antonio Barbadillo. Crianza: No. Variedades: Palomino fino. Cosecha: 2001. Temperatura de servicio: 8º C. Precio aproximado en bodega: 3,60 euros.
Tierra Blanca. Producción Limitada. Blanco. 2001
La bodega elabora Tierra Blanca con uvas seleccionadas de entre sus mejores viñedos de La Vicaría en Arcos de la Frontera, en plena sierra de Cádiz. Atractivo amarillo pajizo con irisaciones verdosas, limpio y muy brillante. Aromas de intensidad media en los que predominan las frutas exóticas y las flores blancas sobre un fondo con ciertos toques delicados de especias (pimienta blanca). En boca es fresco, ligero, con un buen balance acidez-alcohol. Por vía retronasal aparecen notas cítricas y especiadas. Largo y refrescante final de boca. Muy adecuado como vino de aperitivo y un gran compañero de pescados suaves y de ciertos platos fríos elaborados, como el pastel de verduras o de pescado. Bodega: Bodegas José Paéz Morilla y Hermanos. Crianza: No. Variedades: Palomino fino (70%), riesling (30%). Cosecha: 2001. Temperatura de servicio: 9-10º C. Precio aprox. en bodega: 2,98 euros.
Pago de Miraflores. Blanco Fermentado en Barrica
El vino está elaborado a partir de uvas seleccionadas procedentes del pago de Miraflores. Este vino presenta en cata un bonito color amarillo dorado pálido con irisaciones verdosas. Cristalino y brillante. En nariz destacan abundantes notas anisadas, recuerdos tostados y toques de humo, más tarde aparecen recuerdos especiados -vainilla- junto a ecos de fruta blanca madura. En boca resulta fresco y equilibrado con un buen balance gustativo entre los matices tostados y frutales. Agradable final con recuerdos especiados y ahumados. Maridará a la perfección con pescados como el cazón en adobo o una buena urta a la roteña. También será perfecto compañero para un arroz meloso con langostinos de Sanlúcar.Bodega: Hijos de Rainera Pérez Marín. Crianza: Fermentado en barrica. Variedades: Palomino fino. Cosecha: 2001. Temperatura de servicio: 9-10º C. Precio aproximado en bodega: 4,35 euros.