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'Navegar' desde el escaparate de las tiendas

La Galería Kaufhof, situada en el centro comercial del distrito berlinés de Neuhöll, ha sido el primer gran almacén en poner en marcha una nueva y original manera de atraer la mirada de los transeúntes. Ha mezclado su escaparate real con otro virtual.

El establecimiento utiliza un sistema, creado por la compañía Wincor Nixdorf, que proyecta sobre una lámina pegada al cristal del escaparate de toda la vida una gigantesca página web (de más de 200 centímetros de diagonal), que permite al cliente interesado conseguir información de los productos y las ofertas del día de una manera rápida y sencilla, navegando con el dedo a través del contenido de la información como si estuviera sentado frente al ordenador de su casa.

La adopción de estos terminales para el comercio supondrá la ampliación de sus capacidades hasta todo lo que el ciberespacio les permita. 'Podrán exponer todos los productos que deseen, renovarlos todos los días y a cualquier hora. Y pueden insertar toda la información acerca de los artículos que quieran, ampliando enormemente las posibilidades de exposición', dice un portavoz de Wincor Nixdorf.

Los curiosos transeúntes, además, no estarán solos. Carina, una dependienta virtual, les conducirá a través del programa del escaparate virtual y les animará a realizar un diálogo interactivo por medio de la voz y de los gestos. La finalidad es convertir el expositor en un punto de venta en sí mismo, ya que se convierte en un anuncio audiovisual y su efectividad aumenta.

'El movimiento y el sonido de las imágenes, unido a la novedad del producto, atraerán a las personas, aunque sólo sea para echarle un vistazo', añade la empresa.

Un par de ejemplos para comprender la potencialidad de la invención. Cuando una persona pase ante una inmobiliaria podrá acceder a toda la información de las promociones, los distintos complejos en construcción, precios, financiación e, incluso, desde el mismo escaparate podrá visitar virtualmente el piso en el que esté interesado. En el caso de una agencia de viajes, cualquier transeúnte que se acerque accederá a todas las tarifas, ofertas, destinos y plazas libres. Hasta podrá reservar sus vacaciones sin entrar en el establecimiento, y todo sin horarios de apertura y con la ayuda de ese maniquí virtual dispuesto a trabajar 24 horas al día.

Desde un punto de vista técnico, la tienda que desee implantar un escaparate-web necesitará disponer de un PC multimedia, un proyector, una lámina reflectora y un módulo de reconocimiento de gestos. La curiosidad del viandante estará garantizada.

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