Las cadenas de ropa infantil viven su propio 'baby boom'
Los niños ya no aprovechan la ropa de sus hermanos mayores; ahora cada temporada aparecen nuevos modelos que dejan obsoletos los del año anterior. Así lo han entendido las principales cadenas de moda infantil implantadas en España y empeñadas en llevar el concepto de moda hasta los más pequeños.
No son sólo Prenatal, Catimini o Mayoral las que se han lanzado a la conquista de un mercado en alza, la mayoría de las enseñas han puesto en marcha importantes planes de crecimiento en el país con menor tasa de natalidad del mundo. 'A nosotros no nos interesa el número de nacimientos, sino la tasa de consumo y cada vez se consume más. Intentamos que las madres compren más con precios muy competitivos', señala José María Bagur, director gerente de la cadena catalana Cribaggi.
En esta misma línea se pronuncian Manuel de la Maza, gerente de la cadena Charanga, y Javier de Rivera, director general de Neck & Neck, dos compañías españolas con amplios planes de crecimiento. 'Es verdad que hay menos niños, pero el gasto medio por niño ha aumentado considerablemente y eso nos permite mantener nuestros planes de expansión', apunta De Rivera.
Neck & Neck, dirigida a un público de poder adquisitivo alto, cuenta con 141 establecimientos, de los que 43 son propios, y el resto, franquiciados. Además de continuar con su proyecto de crecimiento en España, también ha canalizado parte de sus esfuerzos hacia el crecimiento en el extranjero; de hecho, ya está presente en 14 países.
En el caso de Charanga, que cuenta con 148 tiendas, de las que 62 son franquiciadas y 85 propias, ha incorporado este año un total de 33 establecimientos a su red y el objetivo, según Manuel de la Maza, es abrir entre 30 y 35 tiendas anuales entre España y Portugal, donde ya dispone de 10 locales (tres propios). De momento, su expansión se centrará de forma especial en la península Ibérica, aunque también está presente en Venezuela, Austria y Arabia Saudí. En todos estos mercados se prevén nuevas aperturas.
La compañía, constituida en 1991 por un grupo de empresarios malagueños, alcanzará este año una facturación de unos 24 millones de euros, sin incluir los márgenes de las tiendas.
En el caso de la cadena catalana Cribaggi, cuenta con 25 establecimientos en España (todos franquiciados) y dos en Venezuela, donde ha llegado a un acuerdo con unos empresarios locales para venderles la masterfranquicia, es decir, la exclusiva de explotación de la marca en este país.
'Pensamos seguir abriendo en el mercado español donde apostamos por un crecimiento continuado pero controlado, seleccionando mucho a los franquiciados y cuidando las ubicaciones', señala José María Bagur. La cadena, que pretende incorporar unos cinco asociados al año, considera que muchas veces es más rentable apostar por las ciudades con poblaciones medianas que abrir un establecimiento en un centro comercial de Madrid o Barcelona.
Interés de los franceses
Aunque en España hay un buen número de enseñas de moda infantil como Caribu, Nanos, Pili Carrera, Mayoral, Neck & Neck, Charanga o Cribaggi, los líderes del sector son los franceses. El número uno mundial es el grupo Zannier, que cuenta con marcas como Catimini, IKKS, Chipie o Z, entre otras. Su interés por el mercado español queda bien patente en el desarrollo de algunas de sus cadenas y en sus planes de expansión.
Pero lo más relevante es el interés que están mostrando algunas enseñas francesas por el mercado español. Orchestra, Petit Patapon, Jacadi y Sargent Major son los ejemplos más notables.
Jacadi, que ya cuenta con 19 tiendas en España y una facturación de seis millones de euros en 2001, ha iniciado contactos para buscar un socio que gestione la masterfranquicia para todo el mercado español. Según la compañía, su objetivo es ampliar la red comercial en los próximos tres años y por ello busca un masterfranquiciado. 'æpermil;ste servirá de gestor y responsable del desarrollo y representación del franquiciador de forma exclusiva, adaptando el negocio a las características del territorio', según la empresa.
También Sargent Major, enseña que ya tiene una tienda propia en Barcelona, está buscando franquiciados para extender su marca en España. El objetivo son ciudades con más de 100.000 habitantes para alcanzar una red de unos 30 establecimientos en tres años. En 2003 se prevé la incorporación de entre seis y siete tiendas y, a partir de 2004, unas diez al año.
Diseño propio y confección subcontratada
En los últimos cinco años el número de enseñas especializadas en moda infantil se ha incrementado en un 66% al pasar de 12 marcas a finales de 1997 a 20 al principio de este año.El concepto de ropa infantil ha cambiado y también el modus operandi. Hasta hace poco, eran los propios talleres quienes diseñaban los modelos que luego vendían las tiendas. Ahora, en cambio, son las cadenas quienes imponen sus criterios estéticos. Cada marca cuenta con su propio taller de diseño compuesto por profesionales que elaboran entre dos y cuatro colecciones por temporada. La mayoría de las cadenas también realiza el patronaje y el corte de las prendas, al mismo tiempo que mantienen un exigente control de calidad. La confección, en cambio se subcontrata a talleres que trabajan casi en exclusiva para cada una de las marcas. Todo ello permite unos precios más competitivos.