La banca entra de lleno en la batalla de incentivos por los planes de pensiones
Este año la campaña vendrá marcada por las bonificaciones y por las diferentes fórmulas imaginativas para tratar de captar más clientes en planes de pensiones. Como muestra, el SCH, que ayer dio a conocer oficialmente su promoción, ha querido innovar la oferta con un plan de pensiones que por primera vez invierte en fondos de inversión inmobiliarios del grupo y de terceros.
El fin es que el cliente tenga una oportunidad para diversificar su cartera, explica un portavoz del banco. La entidad ha comprobado que últimamente crecía entre sus clientes la demanda de inversión en este sector ahora en alza. Completa su gama con otros tres productos. El SCH 2002 Renta Fija y un garantizado que asegura el 100% del capital invertido más el 82% de la revalorización media mensual de una cesta de fondos de inversión de renta variable global. El plazo es de cinco años y diez meses. Por último, un producto menos tradicional que el banco denomina de gestión alternativa.
El banco, segundo en patrimonio gestionado (5.230 millones de euros) ha reestructurado su departamento de gestión de activos para enfocarlo hacia un mayor asesoramiento al cliente. Como su rival, el BBVA (primero en ahorro gestionado, 9.436 millones hasta septiembre, según datos de Inverco), el SCH tampoco ha querido prescindir de los regalos promocionales (un juego de maletas y un equipo de sonido, según las aportaciones). También hacen uso de este gancho Citibank, el Banco Popular y una larga lista de entidades (con Bankinter entre las escasas excepciones).
Algunas entidades reconocen que es poco profesional, pero lo justifican por su continuado éxito. Otro de los retos que el sector admite que no logra alcanzar es desestacionalizar las aportaciones, es decir, que los clientes hagan la inversión no a finales de año, sino durante todo el ejercicio. La mayor parte de entidades ha presentado su campaña en octubre y noviembre.
Bankinter se ha volcado este año de nuevo en lo que se presenta como el plato fuerte de este año: las retribuciones con un porcentaje sobre el traspaso de planes o las aportaciones. Repite su llamado Programa Retorno que retribuye un 0,20% el primer año y va subiendo hasta el 0,35% el cuarto año. Asimismo ofrece un sistema de subastas para la bonificación. El objetivo es captar 12.000 nuevos clientes y 72 millones de euros en patrimonio, según explicó Ignacio Lozano, responsable de planes de pensiones del banco. En septiembre contaba con 325 millones en ahorro gestionado. El BBVA también bonifica las aportaciones.
Los planes garantizados aún jugarán un papel primordial en estos dos meses ante la incertidumbre en las Bolsas, aunque el verdadero boom promocional lo vivieron el año pasado. La tercera entidad por patrimonio, La Caixa, a través de VidaCaixa, fue una de las entidades que más protagonismo dio a estos productos. Y este año también ha recurrido a la rentabilidad garantizada, aunque introduciendo bonificaciones y una de las fórmulas imaginativas que están poniendo en práctica las entidades. En este caso, sus dos planes cubren la pérdida de rentabilidad por inflación, pero la europea, no la española, más elevada. Caixa Catalunya y Caser también recurren a garantizados. Por su parte, Caja Madrid ha lanzado cuatro nuevos planes, uno de ellos volcado en la renta variable.
Seguros de jubilación, desde los 40 años
Los españoles contratan más los seguros de jubilación entre los 41 años y los 50. Después, la demanda, curiosamente, empieza a decaer, según revela un estudio que la agrupación de vida y pensiones de la patronal de seguros Unespa ha encargado a Intergallup.Paradójicamente, los españoles suelen suscribir seguros con cobertura de fallecimiento mucho antes, entre los 31 y 41 años, esto coincide en ocasiones con la solicitud de una hipoteca que conlleva la contratación de una póliza de este tipo.