El mercado se modera y busca la eficacia
Fabricantes y distribuidores presentan aplicaciones ligadas a Internet para ahorrar costes y esquivar los problemas de seguridad en la red
El uso del comercio electrónico entre empresas (B2B) y particulares (B2C) va calando lentamente entre las compañías españolas, aunque a un ritmo mucho menor del esperado. Según el último informe de la Asociación Española de Comercio Electrónico (AECE), el 35,6% de las empresas consultadas utilizan el comercio electrónico como herramienta de trabajo diario, aunque las ventas están aún muy lejos de las previsiones realizadas hace dos o tres años.
Miguel Ángel Perdiguero, consejero delegado de Adquira, apunta a la seguridad como una de las responsables del frenazo, aunque cree que va a afectar más a los consumidores finales, 'que seguirán teniendo miedo a la hora de hacer compras a través de la Red. Otro caso distinto es el de los proveedores que están dando una respuesta muy positiva al comercio electrónico entre empresas y están perdiendo el miedo a operar a través de este sistema'. En este segundo caso señala que la implantación de sistemas rápidos de acceso a la Red, como el ADSL, 'ha servido para ahorrar mucho tiempo y dinero a las empresas. Este intercambio de información era impensable en la época en la que había que esperar más de cinco minutos para descargarte una página en tu ordenador'. Esa opinión es compartida por Manuel Dios, director de marketing de Acens, quien apunta que el principal obstáculo para el desarrollo del comercio electrónico en la actualidad son las barreras culturales y el escaso desarrollo de la infraestructura. 'La evolución de la sociedad de la información ha sido una carrera en la que se ha trabajado muy bien al principio (con el desarrollo de las páginas web) y al final (con la fabricación de soportes cada vez más sofisticados), pero ha tenido muchas carencias en la mitad (las infraestructuras), motivadas por las inversiones fallidas de las operadoras en UMTS'. Además afirma que las distintas Administraciones deberían mostrar más apoyo para que las pymes pudieran entrar en el mercado, 'con medidas como la rebaja de tarifas para adquirir un dominio .es'.
José Antonio Ramos, presidente de Aqua-e Solutions, cree que es un buen momento para invertir en comercio electrónico. 'El mercado se ha moderado y ha comenzado a seleccionar sólo aquellos proyectos que aporten algo de valor añadido. Las relaciones tradicionales del comercio están desapareciendo y se está dando un cambio en la demanda: el que mejor se mueve en el mercado es el que ofrece el producto más rápido, con menor coste y que lo tenga disponible. En donde falla el modelo español es en la labor de comunicación, ya que no n i el Gobierno ni las grandes empresas están invirtiendo para dar a conocer las ventajas del comercio electrónico para particulares y empresas'. Por último, Valentín Martín, director comercial de Adonix, afirma que la apuesta de las empresas a corto plazo ha sido introducir todas sus aplicaciones en el mundo de Internet. 'No creo que sea un sistema transitorio, sino que puede servir para ahorrar costes en recursos humanos, en producción y en equipamiento informático'.
El 35,6% de las empresas españolas utilizan el comercio electrónico, según el último informe elaborado por la AECE