El FMI revisa a la baja el crecimiento de Alemania para 2003
Para el presente año, el FMI prevé un crecimiento de la economía germana del 0,5%, un cálculo que coincide con el del Ministerio alemán de Finanzas. Ese valor podría ser incluso más bajo si el Gobierno endurece, como ha anunciado, la presión fiscal, o si la coyuntura internacional sigue debilitándose, según la prensa alemana.
El diario cita un informe del FMI sobre Alemania que se publicará en los próximos días según el cual la coyuntura alemana se encuentra en un "estado de recuperación frágil". "La paralización del crecimiento de la economía mundial, la caída en picado de las bolsas, la débil actividad en los mercados financieros, así como la planeada consolidación de la política fiscal impiden que se produzca una recuperación económica fuerte", añade ese informe.
El FMI ve con preocupación el estado de los presupuestos públicos alemanes y calcula que este año el déficit aumentará hasta el 3,5% del Producto Interior Bruto (PIB).
Michael Deppler, responsable del Departamento de Europa del Fondo, ha asegurado hoy que el Pacto de Estabilidad es "un buen marco" que obliga a la reducción del déficit público en la Unión y ha reclamado a Alemania, Francia e Italia que no se aparten del límite del 3%. Respecto de Alemania precisamente ha apuntado que es la nación "que tiene que hacer más" en esa lucha.
El Gobierno alemán redujo, en datos que aún no ha presentado oficialmente, sus previsiones de crecimiento para este año de un 0,75 a un 0,5%, así como las del próximo año, de un 2,5 a un 1,5%.
Nueva rebaja de las previsiones en la zona euro
El FMI ha vuelto a rebajar hoy en unas décimas su pronóstico de crecimiento para la zona euro en 2002 y 2003, después de que, hace apenas un mes, ya hubiese realizado otra revisión a la baja de sus previsiones. El Fondo calcula que el PIB de los doce países crecerá este año un 0,7%, frente al 0,9% pronosticado a finales de septiembre, y que en 2003 se recuperará hasta el 2%, tres décimas menos de lo previsto. El organismo ha alertado de que se han incrementado los riesgos derivados de los choques externos en la zona euro y aconsejado al BCE que no deje de lado la posibilidad de rebajar más los tipos de interés en caso de que la situación empeore. Reclama además al BCE que sea más claro al comunicar su estrategia al público.