Un proyecto de ley impedirá a Villarejo seguir en Anticorrupción
Entre la veintena de artículos del estatuto del ministerio fiscal que se reforman está el de los mandatos de los fiscales jefes, que tendrán un límite de cinco años. Según dispone el nuevo estatuto, no hay límite para el cargo de fiscal general del Estado y el jefe de la Secretaría Técnica de la Fiscalía será un puesto de confianza del fiscal general. El proyecto de ley fue analizado por la Junta de Fiscales de Sala a petición del fiscal general, Jesús Cardenal.
La cúpula fiscal se mostró de acuerdo con la limitación de tiempo en los cargos de fiscales jefes 'porque supone un paso más hacia la equiparación con la carrera judicial', según un comunicado oficial. Así, los fiscales jefes podrán mantenerse en sus cargos durante cinco años (pueden ser prorrogados) al igual que los presidentes de las salas del Supremo, de la Audiencia Nacional, de las Audiencia Provinciales y de los Tribunales Superiores de Justicia. La Junta considera también que el jefe de la Secretaria Técnica debe ser elegido por los fiscales de sala y no por el fiscal general. Además, piden que una vez cesado no pierda la categoría de fiscal de sala.
La mayoría de los miembros de la Junta de Fiscales ha sugerido que se introduzca la obligación de que el nombramiento y cese de un fiscal jefe esté apoyado por un número mínimo de votos favorables del Consejo Fiscal, y que cuando un candidato aspire a subir de segunda a primera categoría (fiscal de sala) el informe previo del Consejo Fiscal sea vinculante.
Renovar el nombramiento
El proyecto de ley provoca la salida de fiscales jefes tan emblemáticos como Carlos Jiménez Villarejo, que dirige la Fiscalía Anticorrupción desde su creación en diciembre de 1995, o del fiscal jefe de Madrid, Mariano Fernández Bermejo, así como del jefe de Inspección de la Fiscalía General del Estado, Juan José Martínez Zato, para quien la nueva norma también limita su mandato a cinco años. Los tres ocuparon sus actuales cargos en la época socialista.
La marcha de los fiscales jefes que hayan rebasado los cinco años de mandato tampoco es segura, ya que podrían ser 'nombrados de nuevo para esa jefatura por sucesivos periodos de idéntica duración', según el artículo 41 del texto legal elaborado por el Ministerio de Justicia y que ahora deberá ser aprobado en el Parlamento.