González considera que la caída de los mercados dificulta procesos de fusión
González, que pronunció ayer una conferencia sobre La industria financiera del siglo XXI invitado por la Cámara de Comercio de España en Francia con motivo del centenario del banco en la capital francesa, considera que existe en Europa 'un exceso de oferta financiera', con más de 8.000 bancos en la zona euro. Pero a las tradicionales trabas políticas y regulatorias que han impedido durante estos años procesos de concentración se le une en la actualidad 'la desaceleración económica y la caída de los mercados, que hacen que sea mucho más difícil abordar cualquier gran operación expansiva', aseguró el presidente del BBVA.
De hecho, González explicó que el mercado no sólo no paga estas operaciones de expansión, sino todo lo contrario. 'El mercado penaliza la asunción de riesgos adicionales'. Y eso a pesar de que 'los posibles precios de adquisición de entidades sean más baratos, el coste del capital ha subido paralelamente al recorte de las cotizaciones en Bolsa', añadió. Por ello, considera que los bancos deben concentrar sus recursos financieros y sus capacidades de gestión para resolver 'de la mejor manera posible esta compleja situación económica y de mercados'.
Ante este panorama financiero, González considera lógico que una reacción prudente y ortodoxa se refleje en una tendencia a fortalecer la base de capital, mejorar la eficiencia (considera que la ratio media debe bajar del 50%) y reducir la exposición al riesgo, promoviendo negocios menos volátiles e, incluso, desprendiéndose de aquellos otros 'que no son estratégicos'.
En referencia a este último punto, González volvió a recordar la política del banco de rotar su cartera industrial de acuerdo a su estrategia de mantener las inversiones que le aporten una rentabilidad del 10% al 12%. Aunque existe otro grupo de inversiones en grandes grupos industriales a los que no se le aplica este baremo y que 'de momento' mantendrá (el banco es accionista de referencia de Telefónica, Repsol, Iberdrola e Iberia).
En su estancia en París, González aprovecho la ocasión para reunirse con el ministro de Finanzas francés y hablar de Crédit Lyonnais, banco en el que el BBVA posee el 3,7%.
Según explicó González, el Gobierno francés ha modificado sus intenciones de vender el 10% que posee en este banco a Crédit Agricole. Pero las dudas sobre el futuro de la participación española en Crédit Lyonnais continúan, puesto que el BBVA venderá este porcentaje si no consigue aumentar su participación, algo que como reconoció el presidente del BBVA 'no parece muy posible'.
Francia e Italia, donde el banco tiene el 14,9% de la BNL, son los dos países europeos donde el BBVA tiene puestos sus ojos para crecer en Europa, pero la situación de los mercados, unida a los problemas geopolíticos, hacen desvanecer por el momento cualquier posibilidad de crecer en estos dos países.
Sólo si despeja la situación de volatilidad de los mercados, el BBVA podría plantearse nuevamente una operación de envergadura en Europa, ya que como siempre ha dicho González el BBVA quiere ser uno de los principales protagonistas en una operación de fusión transfronteriza.
Situación en Irak
En su intervención, González también abordó el tema del terrorismo, clave de la actual volatilidad de los mercados. Y dijo en rueda de prensa que una fórmula de impulsar los mercados es que se esclarezcan las dudas sobre la actuación de Estados Unidos en Irak.
Sobre Latinoamérica, González fue más optimista. En Argentina el banco tiene todo provisionado, y considera que la situación debe ir a mejor. A pesar de ello, el banco no espera tener beneficios en Argentina, donde el BBVA posee el Banco Francés, en dos o tres años. fuentes del banco señalan que en los últimos meses se ha detectado una entrada de depósitos en los bancos argentinos, con lo que se ha vuelto a tener liquidez.
Respecto a Brasil, el presidente del BBVA considera que la situación es distinta, y una vez despejadas las incógnitas electorales este país volverá a la normalidad.
González cree que si Luiz Inácio Lula da Silva se convierte en el nuevo presidente del gigante latinoamericano llevará a cabo procesos económicos 'bastante ortodoxos' y no medidas dramáticas.
González también argumentó que Brasil ha cumplido hasta ahora los acuerdos pactados con el FMI y ha ejecutado una política ortodoxa, lo que ha permitido obtener ayuda internacional después de 'la sobrerreacción de los mercados al cambio de Gobierno'.
Un nuevo proyecto para estrechar la relación con el cliente
Uno de los principales objetivos del BBVA es crecer y recuperar cuota de mercado en España. Para ello pondrá en marcha la próxima semana un nuevo proyecto denominado servicios financieros personales, con el que se pretende estrechar más la relación del banco con los clientes, como anunció el propio presidente el BBVA, Francisco González, en la última junta de accionistas del banco celebrada en marzo. La idea de este proyecto, que será anunciada hoy a los directivos del banco en Sevilla, en la tradicional reunión que mantiene el banco con los altos ejecutivos del grupo, es pasar de la segmentación de los clientes existente hasta ahora a un modelo de banca al por menor con una nueva estructura y filosofía para su red de ventas, encaminada más a un banco de servicios y distribución.El banco ya ha empezado a ganar terreno en España en créditos, donde está ya creciendo a ritmos de la media del sector, y en pasivo líquido (cuentas corrientes), pero su asignatura pendiente son los fondos y los depósitos a plazo. Para el próximo año espera que el ritmo de crecimiento de los créditos se sitúe en el banco alrededor del 12%. González afirmó que el éxito en la industria financiera de los próximos años será para las organizaciones que sean capaces de ser: muy eficientes, orientadas al cliente, flexibles en su organización y en su arquitectura, capaces de atraer y retener al talento y muy receptivas a las inquietudes de las sociedades en las que se implantan. Aunque González no se refirió en ningún momento a la política de dividendo del banco, la idea del BBVA es mantener el mismo dividendo del año anterior, como dijo el presidente el pasado día 2 de octubre en Nueva York. Sólo si el pay-out (porcentaje del beneficio destinado al dividendo) se sitúa por encima del 55% el banco se plantearía reducir la remuneración al accionista, explicó el consejero delegado, José Ignacio Goirigolzarri.