_
_
_
_
Acero

Sidenor y Lucchini suspenden el acuerdo para integrar sus filiales

El acuerdo para fusionar las sociedades en España de Sidenor y las del grupo italiano Lucchini en Francia, aglutinadas en torno a Ascometal, se ha ido al traste. Ambos grupos anunciaron ayer que la integración, pactada en abril de este año mediante un protocolo de intenciones, no se producirá 'ante la complejidad de la actual coyuntura económica mundial', lo que supone dar carpetazo a la creación de uno de los principales holdings europeos en el sector siderúrgico de los productos largos para aplicaciones mecánicas y del automóvil.

Los argumentos ofrecidos en el escueto comunicado de ambas compañías difieren sustancialmente de la interpretación que hace el sector sobre la no fusión de las filiales de Sidenor y Lucchini. Así, medios consultados aseguraban que la ruptura del acuerdo estaba sustentada en una diferencia de criterios sobre la valoración de los activos, sobre los protagonistas de la gestión y también sobre la ubicación de la nueva sede social.

El arranque o no de la fusión de los diferentes activos de Sidenor y Lucchini tenía caducidad. El 30 de septiembre era la fecha tope para poner en marcha un proceso que hubiera supuesto la creación de una nueva compañía con una producción anual de 1,7 millones de toneladas de acero especial y una plantilla superior a los 6.000 empleados.

En el principio de acuerdo de integración alcanzado en abril, Lucchini, a través de su filial Ascometal, aportaba seis factorías en Francia, con una producción de 1,2 millones de toneladas y Sidenor otras tres plantas (Basauri, Vitoria y Reinosa), además de su división de forja, que fabrican en conjunto 700.000 toneladas. Fuera de este pacto quedaron las fábricas de Sidenor en México y Brasil, así como la mayor parte de la estructura industrial del grupo Lucchini en el mundo. En concreto, la firma italiana cuenta con 11 factorías repartidas por Europa, la mayoría de ellas en Italia (ocho), además de las de Polonia, Inglaterra y Suecia (una en cada país).

Optimizar inversiones

La ruptura del acuerdo supondrá una reconducción de las estrategias industriales y comerciales de ambas compañías, sobre todo cuando uno de los objetivos de la integración era el posicionamiento ante sus principales clientes, los fabricantes de automóviles, que optan por proveedores con un fuerte músculo empresarial. La unión de sus activos también buscaba una concentración de las sinergias a la hora de conseguir un mayor rendimiento a las inversiones industriales y las actividades logísticas, entre otras.

Los planes de Sidenor para liderar el mercado mundial de aceros especiales en 2005, con una cuota de mercado del 10%, anunciados por su presidente, Sabino Arrieta, hace año y medio, deberán esperar. Al fallido acuerdo con Lucchini se suma la no materialización de la compra de una compañía siderúrgica en Estados Unidos, a la vez que no ha conseguido cerrar la compra de la mayoría del capital de Krupp Edelstahl Profile (KEP), filial de la multinacional alemana Thyssen Krupp.

Archivado En

_
_