Volatilidad y pérdidas ante los mensajes contradictorios
Los inversores volvieron a enfrentarse a mensajes económicos y empresariales contradictorios ayer en una sesión marcada por la volatilidad y las pérdidas. El buen comportamiento del sector servicios en EE UU y las previsiones favorables de Du Pont tuvieron que luchar contra la alerta sobre beneficios de Advanced Micro Devices, las previsiones a la baja de Bank of New York y el aumento mayor de lo esperado de las peticiones semanales de subsidio de desempleo.
El índice ISM de servicios aumentó inesperadamente, hasta 53,9 desde 50,9, superando las previsiones más optimistas. Los inversores interpretaron la noticia como un síntoma de crecimiento y el dato desató una breve recuperación en las Bolsas. Las ventas no tardaron en regresar y pese a la indecisión posterior las ventas se impusieron. El Dow cayó un 0,49% y el Nasdaq, el 1,77% para cerrar en el mínimo del año.
Advanced Micro Devices (-33%) fue uno de los detonantes de las ventas. Advirtió la víspera al cierre que obtendrá unas pérdidas 'sustanciales' en el tercer trimestre. Credit Suisse y Warburg reaccionaron bajándole el precio objetivo.
La noticia presionó a otras empresas del sector. Intel, por su parte, cayó un 2,17% después de que Lehman le bajara la estimación de beneficios.
Merrill Lynchañadió más presión al recomendar cautela con el sector de hardware.
El sector financiero también se resintió tras la alerta sobre beneficios de Bank of New York (-10,7%). El banco mostró preocupación por la alta morosidad.
Las buenas noticias empresariales tampoco faltaron. Du Pont (+1,18%) anunció que espera superar las previsiones del mercado con sus cifras. SBC Communications (+8,28%) se benefició de los comentarios favorables de Goldman Sachs para el sector.
La tregua de las últimas dos sesiones llegó a su fin ayer y los malos datos económicos y empresariales volvieron a marcar la tendencia de las Bolsas europeas.
La sesión arrancó atenazada por la última tanda de alertas sobre beneficios y la caída de Wall Street la víspera. Las revisiones a la baja que recibieron Deutsche Bank y ARM Holdings empeoraron el sentimiento inversor que se agravó tras conocerse los datos de empleo en EE UU. La mejora del sector servicios al otro lado del Atlántico detonó la recuperación, pero ésta resultó efímera y finalmente las pérdidas se impusieron. Así, las principales plazas cerraron con caídas que oscilaron entre el 0,12% y el 3,88%.
Deutsche Bank (-7,6%) presionó a la banca y se vio afectada después de que Goldman Sachs bajara la recomendación de la compañía. La firma advirtió que otras grandes del sector deberán provisionar para cubrir créditos impagados.
Credit Suisse (-14%) fue otra azotada, afectada por la alerta sobre resultados de la víspera y dudas sobre sus solvencia. El miércoles Moody's puso en revisión la calificación crediticia del banco por las pérdidas de su división aseguradora.
Dentro del sector tecnológico destacó la caída de ARM Holdings tras varias revisiones a la baja. La compañía perdió otro 12,3% después de dejarse un 63% la víspera tras una alerta sobre beneficios.
Brasil se desmarcó de la tendencia general de las Bolsas y ganaba el 3,5% a poco del cierre. Los últimos sondeos siguen dando al candidato izquierdista Lula (45%) como ganador de las elecciones, pero Serra (21%) acorta posiciones y la posibilidad de una segunda vuelta se recibió con optimismo en el mercado.
Sesión de pérdidas en Asia. El Nikkei cayó un 1,25% y perdió la barrera de los 9.000 puntos por primera vez en 19 años. La banca cedió con fuerza ante la preocupación inversora de que las medidas que prepara el Gobierno para acelerar la liquidación de créditos impagados produzca mayores quiebras y tenga efectos negativos en la economía.