Wall Street cede ante nuevas alertas de las empresas
Una de cal y otra de arena. Las noticias empresariales continúan dibujando panoramas contradictorios y, a falta de referencias económicas relevantes, ayer los mercados estadounidenses titubearon para finalmente decantarse por las pérdidas. Dell ayudó a mermar los temores sobre la recuperación de beneficios empresariales al confirmar la víspera que superará las previsiones del mercado con sus cifras. Las alertas sobre beneficios y las revisiones a la baja de varias casas de análisis, sin embargo, no cesaron, ahondando la incertidumbre. Dow Chemical (-8,05%) detonó las ventas al advertir que ganará un 44% menos en el tercer trimestre.
En este contexto y con el conflicto entre Estados Unidos e Irak de telón de fondo, el Dow Jones arrancó a la baja y entró en terreno positivo momentáneamente, para acabar con una caída del 2,31%. El Nasdaq, también indeciso, perdió el 2,17%.
La tecnología también fue víctima de mensajes contradictorios. Dell (+3,41%) favoreció al sector informático, pero Merrill Lynch presionó a los fabricantes de semiconductores al bajar la previsión de beneficios de la industria. Applied Materials (+1,06%) se vio afectada. Cisco (-8,87%) fue otra azotada después de que UBS Warburg le recortara el precio objetivo.
El consejero delegado de Oracle (-2,58%), lejos de apaciguar la incertidumbre, recalcó la ralentización del crecimiento tecnológico y de la economía de EE UU.
El sector financiero también cedió después de que Morgan Stanley bajara la estimación de beneficios de Citigroup (-5,39%), Merrill (-3,16%) y Lehman (-3,38%).
Segunda sesión de avances en las Bolsas europeas. El fuerte rebote de Wall Street la víspera atrajo compradores desde el inicio y las ganancias se mantuvieron pese al mal comienzo de los mercados estadounidenses. El Cac ganó un 3,97%; el Footsie británico, el 2,84%, Alemania, un 2,15%, y Londres, el 2,84%.
Las telecos (+5,33%), las aseguradoras (+5,26%) y las farmacéuticas (+3,85%) se convirtieron en los grupos más beneficiados, aunque las compras favorecieron a 17 de los 18 sectores del Stoxx.
Los indicadores económicos mejoraron ligeramente, aunque no alcanzaron las estimaciones del mercado. El índice de confianza del consumidor de la zona euro aumentó un 0,2%, hasta 98,9 puntos, después de tocar el mínimo del año en septiembre. Pero la cifra estuvo por debajo del 99 estimado.
Prudential (+3,63%) destacó junto a otras del sector como Axa (+10,67%) tras una recomendación favorable de Morgan Stanley.
Vodafone (+7%) favoreció a las telecos después de que el consejero delegado de la compañía asegurara que espera un aumento de suscripciones del 10% para final de año. France Télécom, por us parte, ganó el 10% animada por el nombramiento de Thierry Breton como presidente.
Astrazeneca (+6,5%) subió junto a otras farmacéuticas gracias a una recomendación favorable de HSBC Holdings para la industria.
En el sector tecnológico destacó el avance de Infineon (+7,02%), proveedor de Dell, y el desplome de ARM Holdings (-62,7%). Esta última advirtió que sus beneficios serán un 50% menores a lo previsto.
La falta de dirección marcó la sesión en los mercados latinoamericanos aunque éstos finalmente siguieron la estela de Wall Street. El Gobierno argentino confía en llegar a un acuerdo con el FMI pronto y entre tanto domina la incertidumbre al igual que en Brasil, a la espera del desenlace de las elecciones.
El Nikkei ignoró la tendencia alcista que se respiró en el resto de la región y cedió un 1,23% ayer para caer hasta el nivel más bajo de los últimos 19 años. La banca presionó a la Bolsa después de que Mitsubishi Tokyo Financial reconociera que no alcanzará sus expectativas de beneficio. La noticia aumenta los temores sobre la delicada situación financiera del sector.