La SEPI aporta 214 millones más a Air Comet para zanjar la venta de Aerolíneas

La Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI) da por finalizadas la aportaciones pactadas con Air Comet hace un año con un último desembolso de 210 millones de dólares para Aerolíneas Argentinas, que se ha hecho efectivo en estos días. Esta cantidad se suma a los 548 millones de dólares que la SEPI ha ido desembolsando a Air Comet (300 millones de dólares en concepto de 'pago por los pasivos' de Aerolíneas, y 248 como aportación al plan industrial). En total, el proceso de venta de la compañía argentina ha costado al erario público hasta hoy 758 millones de dólares (773 millones de euros)

Los últimos 210 millones de dólares entregados se justifican por la liquidación del denominado 'balance de transferencia', que ha sido negociado durante todo el verano por técnicos de la sociedad estatal y de la filial argentina de Viajes Marsans.

En la cuantía del 'balance de transferencia' se incluyen conceptos tales como la amortización de las pérdidas en que incurrió Aerolíneas Argentinas desde el momento en que se cerró la auditoría para proceder a su venta, el día 31 de julio de 2001, y la fecha en que se formalizó el traspaso de acciones, el 14 de octubre del mismo año.

También se recoge 'la afloración de deudas en las empresas del grupo aéreo, que no habían sido detectadas en el momento de la venta', según fuentes de la sociedad estatal españolas.

Posición de Air Comet

Aunque las fuentes oficiales de Air Comet que han sido consultadas mantuvieron una posición muy conciliadora en relación con la SEPI ('las relaciones son de colaboración cordial', aseguraron), las posiciones del comprador y el vendedor de Aerolíneas en lo referente al tema del 'balance de transferencia' son a todas luces dispares.

Air Comet ha mantenido con firmeza que la liquidación de dicho balance debía realizarse mediante una aportación de la SEPI por 423 millones de dólares. La sociedad estatal, como ya se ha señalado, ha realizado un último pago por 210 millones y ha señalado que es el definitivo.

En relación con esta divergencia de apreciación entre las partes, la filial de Viajes Marsans explica que 'nunca ha pedido a SEPI nada que no esté en el contrato de venta'.

Con respecto al balance de auditoría, añade que 'a la fecha de venta (14 de octubre 2001) se liquidaron a Air Comet parte de los importes señalados por el auditor, Pricewaterhouse. El resto de las cantidades no abonadas hasta el momento corresponde a contingencias de carácter fiscal, judicial o reclamaciones en curso de diversa índole, que serán atendidas por la SEPI, una vez que sean firmes y se determine su importe, del cual se hará cargo el vendedor como falta de provisión de dichos conceptos en la contabilidad de dichas empresas'.

Conocida la declaración de Air Comet, fuentes de la SEPI aseguraron que no existen disparidades de fondo entre el comprador y el vendedor de Aerolíneas Argentinas, sino una forma distinta de mostrar la misma realidad. 'SEPI ha cumplido con todos los compromisos económicos ciertos que se recogían en el contrato de compraventa de Aerolíneas. Somos conscientes, no obstante de que existen distintos tipos de contingencias, especialmente judiciales, que pueden devenir o no en obligaciones de nuevos desembolsos para la SEPI'.

Proceso habitual

El grupo público añade que 'en el momento en que esas contingencias se confirmen y cuantifiquen, la sociedad estatal se hará cargo de ellas, como por otra parte ha venido ocurriendo en los distintos procesos de privatización que hemos culminado'.

Tanto el comprador como el vendedor de Aerolíneas Argentinas prefirieron no hacer ningún tipo de comentario sobre cuáles son las características de unas contingencias que han sido valoradas por Air Comet en más de 210 millones de dólares.

Fuentes argentinas explicaron a este diario que las principales contingencias que pesan sobre Aerolíneas y que pueden tener consecuencias económicas se refieren a distintos procesos judiciales que la compañía tiene abiertos a raíz de los accidentes e incidentes que distintos aviones de la compañía sufrieron durante el periodo en el que la SEPI o, con anterioridad, Iberia fueron los dueños y gestores.

En medio de estas disputas, las fuentes de Air Comet citadas quisieron resaltar la positiva evolución de Aerolíneas cuando se va a cumplir un año desde su venta. El coeficiente de ocupación de los vuelos se ha situado en el 76% en vuelos domésticos y en el 68 % en los internacionales.

La propietaria de la compañía se convierte en su mayor acreedor

 

Air Comet ha adquirido la deuda que las entidades financieras BBVA, ABN Amro y Citibank mantenían con Aerolíneas Argentinas, con lo que, además de ser el propietario de la compañía aérea, se ha convertido también en su principal acreedor. Fuentes de la empresa han señalado que esta operación les da 'una posición muy significativa en la junta de acreedores' y la vamos a utilizar para 'resolver cuanto antes el proceso de suspensión de pagos'.

 

 

 

 

 

 

 

Como se recordará, el propietario de Aerolíneas hizo recientemente una oferta a los acreedores de la empresa basada en el pago del 40% de la deuda, lo que supone la aceptación de una quita del 60%. El montante total del pasivo asciende a unos 2.000 millones de pesos, que quedarán reducidos a 800 millones. El 45% de esta cantidad debe ser devuelto en dólares, y el resto, en pesos argentinos. La propuesta pretende devolver lo adeudado en dos años atendiendo a los siguientes plazos: 10% a los tres meses a partir del momento en que se llegue a un acuerdo con los acreedores, el 35% a los 12 meses de la formalización del acuerdo y el resto en 24 meses.

 

 

 

Buena parte de los principales acreedores de Aerolíneas Argentinas son empresas españolas, entre otras Repsol YPF, Iberia o SCH. El BBVA se encontraba también en esta lista hasta que Air Comet compró su deuda.

 

 

 

Otros fiadores importantes de la compañía de bandera argentina son el consorcio europeo de construcción de aviones Airbus y la empresa argentina Aeropuertos 2000.

 

 

 

Por otra parte, Air Comet ha cumplido con uno de los compromisos adquiridos al crear un centro de mantenimiento de grandes aviones Boeing 747 en el aeropuerto bonaerense de Ezeiza. El primer Jumbo que está siendo manipulado en estas instalaciones es de Aerolíneas, que 'con esta operación ahorra millones de dólares', según fuentes de la empresa.