Taiwan ayudará a los exportadores afectados por la huelga en EE UU
Los cuatro días de huelga de los puertos estadounidenses de la costa oeste ya se han empezado a notar en otros países, que ven impedido el acceso de sus mercancías a Estados Unidos. Taiwan anunció ayer que concederá ayudas a los exportadores afectados por el paro, que comenzó el pasado 29 de septiembre y aún continúa.
El secretario de la Junta de Comercio Exterior de Taiwan, Huang Chih-Peng, indicó que el valor diario de los productos taiwaneses enviados a EE UU y que no se descargan asciende a 58 millones de dólares (59 millones de euros).
La mayor parte de las exportaciones taiwanesas a EE UU, que alcanzaron los 17.690 millones de dólares (18.050 millones de euros), entran por los puertos de la costa occidental. La paralización de éstos supone un gasto extra, por un lado, derivado de la imposibilidad de entregar los pedidos y, por otro, el encarecimiento que supone utilizar otro camino más largo.
La Junta aconsejó a los exportadores utilizar otros puertos para descargar las mercancías y negocia con las navieras que ofrecen servicios extraordinarios en los puertos de Vancouver (Canadá), México y la costa este de EE UU. El temor de los taiwaneses es que la huelga se prolongue, ya que se acercan las fiestas navideñas, un periodo clave para las exportaciones de este país.
Los analistas han advertido que la huelga puede causar daños a otros países asiáticos y otras naciones como México, Ecuador o Chile.
El cierre de los 29 puertos de la costa oeste de EE UU, desde San Diego hasta Seattle, está provocado por la disputa entre la patronal, la Asociación Marítima del Pacífico y el sindicato Internacional Longshore & Warehouse. Ambos mantienen en punto muerto unas negociaciones sobre el convenio colectivo, que expiró en julio.
La última reunión, celebrada el pasado martes, concluyó sin haber comenzado, cuando los representantes sindicales acusaron a la patronal de intimidación por acudir al encuentro con guardas armados. Para hoy está prevista una reunión con el Servicio de Mediación Federal en Washington, pero el sindicato, reticente a que participen terceras partes, no había dado ayer su consentimiento.
Los puertos afectados por el paro manejan al año mercancías por valor de 300.000 millones de dólares (306.000 millones de euros) y la industria portuaria calcula que las pérdidas diarias para la economía estadounidense ascienden a 1.000 millones de dólares.