Piqué anuncia una congelación de las tarifas locales en 2003

Piqué ha recordado hoy durante su intervención en el Pleno del Senado que los precios máximos de Telefónica están regulados a través de un sistema (el denominado price cap) que exige que durante el año que viene el conjunto de las tarifas de la operadora bajen un 2% en términos nominales. La compañía es libre de distribuir el descenso como quiera, entre los diferentes tipos de llamadas en función de sus intereses y estrategias comerciales. Según Piqué, lo más probable es que Telefónica opte por congelar las tarifas de las llamadas locales y aplicar la bajada en otro tipo de llamadas.

El ministro también ha explicado que la reforma del price cap que prepara el Gobierno no altera estas exigencias, sino que únicamente saca la cuota de abono mensual -que seguirá subiendo tal y como estaba previsto- de la cesta de precios con la que se configura el sistema. Con esta modificación, se mantener la obligación de que Telefónica baje sus tarifas, un beneficio para los consumidores menor que antes, ya que no tendrá que compensar la subida de la cuota de abono, con lo que se ayuda a que las operadoras cuentan con más márgenes de beneficio y capacidad de inversión.

Piqué ha aclarado que "es evidente que la bajada de los precios de los últimos años no puede continuar al mismo ritmo, pues llegaríamos al absurdo de que las tarifas dentro de poco sean gratis". Sin embargo, señaló que "todavía hay margen" para bajar más las tarifas, por lo que se mantendrá la exigencia de que las tarifas bajen un 2% nominal.

A esta bajada "habrá que añadir la inflación para saber cual va a ser la bajada en términos reales", explicó Piqué, que recordó que desde 1996 las tarifas han bajado un 70 % en términos nominales y un 50% en reales. Además, apuntó que las tarifas en términos reales han bajado más de la mitad desde ese año, mientras el consumo telefónico ha aumentado más del doble.

Un organismo podrá autorizar intercambio espectro radioeléctrico

Piqué ha anunciado, además la próxima creación de la Agencia de Radiocomunicaciones que podrá autorizar posibles intercambios de espacio radioeléctrico ya concedido, aunque ha advertido de que no se hará "en términos estrictos de mercado".Operadores de telecomunicaciones solicitan un cambio de regulación tanto nacional como europea para que este espectro se pueda comprar y vender y, en este marco, Telefónica ha anunciado que no explotará las licencias de telefonía móvil de tercera generación UMTS que tiene fuera de España y esperará a que la regulación permita su venta.