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Metalurgia

El grupo Alibérico compra a Alcan una fundición en Italia por 18 millones

Clemente González Soler, presidente del grupo Alibérico, anunció ayer que la compañía española ha dado el primer paso de 'una apuesta muy fuerte' por expandir su actividad en Europa.

El grupo que fundó este compostelano en 1987, de capital netamente español, invertirá 18 millones de euros para hacerse con el segundo fabricante de discos de aluminio europeo, Alcan Pieve. Estos discos tienen múltiples aplicaciones en la fabricación de utensilios de cocina, envases e iluminación.

Alcan Pieve es una de las tres plantas que la multinacional canadiense tiene en la localidad milanesa de Pieve Emanuele. Con una capacidad de producción de 22.000 toneladas de discos al año y una cuota de mercado del 18% en la Unión Europea, trabajan aquí 163 personas, que se integrarán en el grupo español en octubre bajo la nueva denominación social de Aluminium Pieve.

Esta plantilla podría aumentar 'entre un 20% y un 25%', según el presidente de Alibérico, si se consigue cumplir el objetivo de duplicar la facturación actual de la planta para 2004, que asciende a 60 millones de euros, y disputar así a Pechiney el primer puesto en ventas de discos de aluminio en Europa.

González Soler afirmó que la compra se financiará con recursos propios y adelantó que 'en este año cerraremos tres o cuatro operaciones más pequeñas de compra en Europa de las cinco que estamos negociando'. Entre los países que son objeto de su interés podría estar Alemania y Europa, con la idea de conseguir que el negocio exterior del grupo suponga un 50% de las ventas en 2003. Prevé, en cualquier caso, no tener que recurrir al crédito bancario.

Hasta la fecha, el grupo Alibérico está integrado por 31 empresas, que facturan en conjunto 120 millones de euros y emplean a 1.500 profesionales. Esta compra supone un importante salto para la compañía, que en el exterior sólo contaba con un pequeño centro fabril en Lyon (Francia), una división de Eurocolor, especializada en el lacado del aluminio. González Soler explicó que 'las negociaciones con Alcan han sido muy duras', pero que las ha facilitado la adquisición el año pasado de una pequeña empresa de envases madrileña, Palco.

Las instalaciones adquiridas a Alcan en Milán constan de una fundición con capacidad de 60.000 toneladas anuales y otra planta de laminación de 50.000 toneladas. La operación también incluye la compra de los terrenos, naves y maquinaria.

El fundador de Alibérico afirmó que su objetivo es alcanzar una facturación anual de 300 millones de euros para 2005 y señaló que se proponen empezar a consolidar los resultados del grupo a partir del año que viene. En referencia a la evolución de la antigua fábrica de Inespal en Linares (Jaén), Conversión de Aluminio, que adquirió a la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI) el pasado año, aseguró que en este ejercicio 'alcanzará el punto de equilibrio', tras más de 20 años de números rojos.

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