Andalucía liquida su minería con 120 millones de coste laboral
La reconversión de la minería metálica andaluza ya está en marcha. Una vez encauzado el cierre de Boliden, el acuerdo sociolaboral firmado la semana pasada intenta resolver el futuro de los 1.300 trabajadores y prejubilados de Minas de Almagrera (propiedad de Navan), Minas de Río Tinto (MRT), Nueva Tharsis y Filón Sur.
La piedra angular del plan, que tiene el beneplácito de los sindicatos mayoritarios, son las nuevas 700 prejubilaciones que financiarán al 50% la Junta de Andalucía y el Gobierno central. Estas bajas permitirán redimensionar las plantillas de empresas como MRT o Almagrera, que todavía luchan por evitar el cierre. Para los mineros que no puedan beneficiarse de estas prejubilaciones, se establece también la posibilidad del contador cero o reposición de las prestaciones por desempleo.
Además de las jubilaciones anticipadas, el segundo plato fuerte del plan serán las recolocaciones, de las que podrían beneficiarse otros 300 mineros. Esta apuesta por la diversificación de las cuencas mineras afectadas incluye, por parte de la Administración central, la prioridad de incorporación al mercado laboral y programas específicos dentro de las políticas activas de empleo gestionadas por el Inem.
La Junta, por su parte, se encargará de habilitar ayudas sociales, planes de formación y recolocaciones en actuaciones de restauración medioambiental.
Los sindicatos, más satisfechos en el caso de UGT y muy críticos con el acuerdo en las filas de CC OO, atribuyen los frutos de este plan a la gran movilización que han mantenido los mineros andaluces. Para Luciano Gómez (UGT), la búsqueda de alternativas a la actividad minera 'debe ser ahora la prioridad de todos'. Como ya ocurrió en Aznalcóllar tras la marcha de Boliden, la Junta espera atraer nuevos proyectos de grandes empresas a la zona y completar la diversificación con la implantación de pymes en actividades turísticas, medioambientales o agroalimentarias.
Los supervivientes
A la espera de que se defina el futuro de Minas de Almagrera, sólo MRT y los futuros proyectos de MK Gold (Cobre Las Cruces) y Presur (Aguas Blancas) mantienen la esperanza de que la minería metálica andaluza es todavía rentable con una nueva dimensión. Filón Sur y Nueva Tharsis, por su parte, están en plena diversificación.
Minas de Río Tinto acaba de ampliar capital y ha puesto en marcha una línea de explotación de oro que emplea a 180 empleados de los cerca de 500 de la empresa. Carlos Estévez ha asumido en la citada operación el 92% de las acciones y a pesar de la movilización y oposición que CC OO mantiene, en el consejo de administración se plantea abordar otros proyectos que puedan emplear a más mineros.
Con un futuro más despejado de obstáculos se desarrollan los proyectos de la norteamericana MK Gold y de Presur. La primera ha anunciado que invertirá más de 400 millones de euros en explotar el yacimiento Cobre Las Cruces, ubicado en la localidad sevillana de Gerena. Y Presur ha evitado el cierre gracias a una pionera alianza público-privada para la explotación del rentable yacimiento de Aguas Blancas.
Navan se plantea cerrar Almagrera
Minas de Almagrera, que todavía dispone de un yacimiento que puede ser rentable, parece, sin embargo, abocada a la liquidación tras decidir la firma andaluza Insersa que no presentará oferta de compra por esta explotación propiedad de Navan. El fracaso de las negociaciones y el posterior anuncio de Navan de que podría desmantelar Minas de Almagrera coincidió la pasada semana con la firma del acuerdo sociolaboral de la minería de Huelva, que permitirá rebajar la actual plantilla de 450 empleados y atraer con ello a nuevos potenciales compradores. También quedó saldado el último conflicto laboral de Almagrera, que está en suspensión de pagos y paralizada. Tras quedar frustrada la operación de venta, la multinacional irlandesa advirtió que los trabajadores se negaban a cumplir los servicios mínimos de mantenimiento, una actitud que, según la empresa, podría entrañar riesgos medioambientales. Finalmente los servicios mínimos han quedado pactados con la participación de 20 operarios diarios.
Luciano Gómez, responsable de UGT para la minería onubense, no cree que el plan sociolaboral anime a Insersa a reconsiderar su postura, aunque sí está seguro de que habrá empresas mineras interesadas en comprar los yacimientos de Almagrera si salen a subasta en una eventual liquidación. A su juicio, lo que más desanima a los inversores son las incertidumbres del sector, la abultada deuda (60 millones de euros) y la exigente normativa medioambiental.