Las diferencias entre la Generalitat y los bancos ahogan a Opening
Los problemas financieros de Opening no han tocado a su fin. Las cuatro entidades financieras que el pasado jueves se comprometieron a ofrecer un préstamo de 6,9 millones de euros a la compañía, condicionan el crédito a que un organismo público también ofrezca una aportación de capital a la compañía. Según ésta, los bancos reclaman que un organismo público financie con 18 millones de euros la empresa. Esta subvención permitiría a la empresa hacer frente al impago de salarios de sus trabajadores y asegurar la actividad en su red de 74 centros propios hasta finales de 2003, fecha en la que finaliza el 85% de los cursos contratados por los 45.000 alumnos de las academias propias de Opening.
La Generalitat de Cataluña, que se ha ofrecido a tutelar el crédito de los bancos para garantizar la actividad en las aulas, se niega a ofrecer ninguna ayuda a la red de academias. El consejero jefe de la Generalitat catalana, Artur Mas, explicó ayer que la Administración catalana tiene mucho interés en resolver el conflicto de Opening, pero rechazó la utilización de fondos públicos para solventarlo. 'Nosotros facilitamos la reunión entre los bancos y la dirección de Opening para que éstos ofrecieran nueva financiación a la empresa; sin embargo, tras la reunión, nosotros no estamos dispuestos a aportar la mayor parte del dinero necesario para que reabra sus centros, tal y como piden las entidades financieras', reiteró el consejero jefe. En opinión de Mas, las negociaciones 'están encalladas y debemos ver cómo evoluciona el tema'.
Durante el día de hoy, la Dirección General de Consumo se reunirá con la Comisión de Cooperación de Consumo, integrada por los directores generales de Consumo de cada comunidad autónoma para tratar el caso de Opening. El encuentro tiene como objetivo analizar la información recopilada por las comunidades autónomas para dictaminar si Opening ha incumplido la normativa.
El comité de empresa y la dirección de Opening volverán a reunirse el próximo viernes para discutir el resultado de las negociaciones que la dirección está llevando a cabo para evitar el cierre. El secretario de acción sindical de CC OO, Simón Rosado, considera que la empresa 'se dirige a la quiebra aunque nadie quiere sentenciarlo'. Para Rosado, 'la única salida para la empresa es que se pacte que los alumnos dejen de pagar a los bancos y se liquide la empresa'. Desde el comité de empresa ya se está tramitando un expediente de regulación de empleo para toda la plantilla.
La crisis abierta en Opening ha situado en el punto de mira a su competidor, Wall Street Institute, propiedad del grupo estadounidense Sylvan Learning Systems. El cierre de cerca de 33 centros en el último año ha creado desconfianza en su alumnos, aunque desde la compañía aseguran que el cese de la actividad en algunos centros responde 'únicamente a problemas puntuales que ya han sido resueltos'.
Los trabajadores de Brighton reclaman sus salarios
Al margen de los problemas en Opening y en Wall Street Institute, la crisis también ha afectado a cadenas de enseñanza menores. Los trabajadores de Brighton, una red catalana de siete centros de enseñanza de idiomas donde cursan cerca de 10.000 alumnos, también han denunciado irregularidades en la compañía. Los 150 empleados de Brighton han hecho público que la empresa ha seguido durante estos años una 'política laboral abusiva'. La plantilla denuncia la existencia de contratos fraudulentos e impagos a la Seguridad Social. En estos momentos, CC OO gestiona 50 reclamaciones por impago de salarios y despidos improcedentes. A pesar de las denuncias que han presentado los trabajadores ante la Inspección de Trabajo de la Generalitat, no han obtenido respuesta para examinar la situación. La crisis que afecta a las grandes redes del sector y que también padece Brighton es fruto de 'realizar una actividad docente totalmente nula en sus centros, y primar por encima de los contenidos unas campañas de publicidad sumamente atractivas para captar el público', opina la presidenta de la Federación de Centros de Enseñanza de Idiomas, Esther Paredes. Según Paredes, los asociados a las federación, que representan cerca de 3.000 pequeñas y medianas academias de idiomas del país, están recibiendo ofertas por parte de antiguos profesores de Opening que solicitan incorporase como profesores a los centros. 'No podemos absorberlos, ya que no están preparados para dar clases'.