El descenso del paro en agosto espolea Wall Street
El buen dato del paro en EE UU, que en agosto se redujo al 5,7% frente al 5,9% de julio, sirvió como excusa para que Nasdaq y Dow Jones se apuntaran ayer su mayor subida en las últimas cuatro sesiones, un 3,54% y el 1,73%, respectivamente. Sin embargo, el rebote de ayer fue un ejemplo más de la impetuosidad con la que han actuado los inversores estadounidenses durante la semana, un periodo en el que el Dow ha caído el 2,72% y el Nasdaq un 1,48%.
En medio de un clima prebélico por la amenaza de un ataque contra Irak, Wall Street reaccionó el martes (el primer día de sesiones tras el festivo de lunes) con fuertes retrocesos la caída de la actividad industrial, reflejada en el índice ISM de agosto. Wall Street se enfrascó entonces en un profundo debate sobre la acentuada debilidad de la economía que planeó sobre las Bolsas hasta el jueves, día en que el mercado conoció que el sector servicios también flaqueó en agosto. Las opiniones negativas sobre la economía parecían ayer desterradas tras el buen dato del paro, un síntoma de que la volatilidad afecta tanto a los índices como a las opiniones de los expertos.
La misma sobrerreacción generó la incertidumbre creada por Intel. Esta compañía perdió entre el martes y el jueves un 9,35% ante el temor de que recortara sus metas de beneficio. Ayer, subió un 7,8% tras rebajar sólo el rango más alto de sus previsiones. Y con ella el resto de competidores KLA Tencor (+6,81%), Applied Materials (+7,29%), Micron (+2,09%) y Novellus Systems (+6,68%), perjudicadas en los días anteriores.