El 40% de las pymes de la UE asegura que Internet no se adecua a su negocio

La Comisión Europea dice estar convencida de que las Administraciones tienen un importante papel que jugar en el desarrollo de Internet y el comercio electrónico en las empresas, en especial de las pymes. Estas empresas 'necesitan apoyo por parte de las instituciones públicas para acelerar la difusión de Internet y del comercio electrónico y, por tanto, evitar la brecha digital que separa a las grandes empresas de las pymes'. Una de las principales barreras a las que se enfrentan las compañías más pequeñas es la falta de convicción de que Internet o el comercio electrónico pueden aportar algo a su negocio. Además, a diferencia de lo que sucede en las grandes firmas, que tienen capacidad para contratar abogados especializados, las pymes creen que es mejor evitar la complejidad y disparidad de normas legales. La CE cree que las pequeñas y medianas empresas serían las más beneficiadas de una simplificación de las leyes.

En cualquier caso, el apoyo de las Administraciones públicas puede traslucirse en una simple conveniencia de uso. Es obvio, dice en su documento la CE, que la futura generalización de las Administraciones públicas en la Red, incluyendo todo tipo de peticiones de información, presentaciones de impuestos por Internet y todas las gestiones que habitualmente tienen que realizar las empresas con las instituciones, ayudará en buena manera a que las pymes vean en la introducción de Internet una razón de eficacia.

El escepticismo que muestran las pequeñas y medianas empresas a la hora de considerar Internet como una herramienta de gestión importante se ve reforzada por dos nuevos fenómenos que los expertos han denominado tecnofobia y fatiga digital. La tecnofobia de los directivos de las pymes ha sido hasta ahora más frecuente. Sin embargo, los empresarios empiezan a mostrar síntomas de cansancio ante el esfuerzo de ponerse continuamente al día respecto a los avances de las nuevas tecnologías.