Los beneficios semestrales de Campofrío aumentan un 46%
La compañía que preside Pedro Ballvé ha iniciado un nuevo plan de tres años de duración que persigue alcanzar una facturación en 2005 de 1.823 millones de euros y un beneficio neto cercano a 59 millones de euros.
En los primeros seis meses de aplicación de dicho plan el grupo, según comunicó ayer a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), ha aumentado su resultado atribuido un 46%, de los 3,6 millones de euros registrados entre enero y junio de 2001 a 5,26 millones obtenidos en la primera mitad de 2002.
Campofrío ha logrado estas ganancias a pesar de 'unos resultados extraordinarios 17,2 millones de euros inferiores a los del mismo periodo del año anterior, parcialmente compensados por los beneficios fiscales registrados en el periodo, que ascienden a nueve millones', señala en la nota comunicativa.
La facturación, sin embargo, ha sufrido un descenso cercano al 5% debido, según explica la empresa, al incendio y posterior cierre de la fábrica de Campofrío en Arganda (Madrid). El resultado neto de explotación ha sido superior a los 17 millones de euros, un 22% más al conseguido en los primeros seis meses de 2001.
Las acciones del grupo subieron ayer en la Bolsa de Madrid un 0,73%
En el segundo trimestre del año se puede deducir que el beneficio del grupo ha caído en comparación con el obtenido en el primer trimestre. En los primeros tres meses del año Campofrío informó de unos beneficios de 5,8 millones, frente a los 5,25 anunciados.
Banesto Bolsa indica que los altos beneficios semestrales presentados por el líder de la industria cárnica española pueden ser engañosos si se comparan con los anunciados en 2001.
El año pasado fue uno de los peores para el sector, golpeado por la crisis de las vacas locas y la fiebre aftosa porcina, por lo que eran predecibles unas ganancias mucho mayores este año en comparación con las registradas en el ejercicio pasado. La misma sociedad indica que cumplir con los objetivos previstos será complicado debido a la deuda financiera que soporta el grupo. Campofrío ha incurrido en un elevado endeudamiento en los últimos años para lograr la adquisición de Navidul y OMSA. De todas formas, Banesto considera que la nueva estrategia del grupo es acertada.
Reorientación inversora
La ampliación de capital efectuada por el grupo cárnico el pasado mes de abril, por un importe de 100 millones de euros, supuso el pistoletazo de salida para llevar a cabo una reordenación, al menos geográfica, de los negocios del grupo.
Durante este año, Campofrío ha abandonado sus actividades en República Dominicana y Filipinas y ha vendido la filial polaca Ostroleka. En Argentina, el grupo mantiene una participación en Campo Austral a la espera de encontrar un comprador. La salida definitiva del país podría demorarse tres años, según informó en abril a la CNMV.