La Reserva Federal cree apropiado el actual nivel de tipos para impulsar la reactivación
El gobernador de la Reserva de Filadelfia, Anthony Santomero, aseguró ayer que el actual nivel de tipos 'es el apropiado para apoyar el proceso de recuperación'. 'En algún momento, la prudencia dictará que debemos revisar la política monetaria hacia una posición más neutral', aseguró el gobernador.
Las palabras de Santomero cayeron como un jarro de agua fría sobre los inversores de Wall Street que, tras el pesimismo mostrado la semana pasada por la autoridad monetaria, confiaban en una rebaja de tipos para animar la reactivación.
Otros dos gobernadores apostaron ayer por que la recuperación se producirá sin necesidad de bajar de nuevo los tipos. Robert Parry, de la Reserva de San Francisco, insistió en que la economía se encuentra sumida 'en una recuperación modesta'. Y Michael Moskow, de la Reserva de Chicago, aseguró que 'la Reserva Federal no puede, y no debe, tratar de paliar cada pequeño obstáculo' de la economía.
Esta afirmación indicaría que los responsables de la política monetaria de EE UU se inclinarían por que el momento actual de la economía es más un frenazo en el proceso de reactivación que un cambio de tendencia en el mismo.
No obstante, Santomero reconoció que el crecimiento lleva un ritmo más lento del previsto por lo que consideró 'correcta' una revisión a la baja de las previsiones de crecimiento para este año. La última estimación de la entidad, revisada al alza desde el 3%, había fijado en el 3,75% el crecimiento del PIB este año. Para 2003, 'la economía se moverá cerca del potencial' que muchos economistas cifran entre el 3% y el 3,5%, aseguró Santomero.
Esas favorables perspectivas hacen descartar, a su juicio, una doble recesión en EE UU, aunque Moskow reconoció que 'el crecimiento trimestre a trimestre podría ser inestable'.
Evaluación del riesgo
Las razones pasan por el cambio en la evaluación del riesgo por parte de los mercados de la deuda empresarial y de las acciones, tras los escándalos financieros que afectaron a empresas como Enron y Worldcom.
Este cambio ha hecho que a las compañías les resulte más caro endeudarse en los mercados de bonos empresariales y que bajen los precios que pueden determinar en las ofertas de acciones.
Moskow reconoció que 'si se mantuvieran los precios bajos de las acciones, el golpe a los balances de las economías familiares sería un factor negativo para el futuro gasto de éstas' y, por extensión, para el crecimiento del PIB.
El gobernador de Chicago también descartó el riesgo de deflación en el horizonte próximo de EE UU, pero reconoció que la entidad deberá seguir con atención esta amenaza.
'No veo esto la deflación en el horizonte. Es algo que tenemos que supervisar con cuidado', dijo Moskow 'Sería una preocupación si todos los precios empezaran a declinar en promedio', aunque insistió, 'no veo un descenso generalizado en los precios de las viviendas a nivel nacional' a diferencia de lo sucedido en Japón a finales de los noventa.