Hacienda, a la caza de la bruja de Internet
Internet y las nuevas prácticas comerciales que conlleva están siendo el escenario de numerosos conflictos legales. La famosa administración de lotería leridana La Bruixa d'Or está viviendo las consecuencias de como muchas veces la norma tarda en adaptarse a la nueva realidad.
La Bruixa d'Or no sólo es conocida por ser la administración de lotería que más vende en España desde hace cinco años, sino también es un citado ejemplo de puntocom que situada en un Sort, una localidad de 1.000 habitantes, ha sabido utilizar las nuevas tecnologías para vender en todo el mundo.
Xavier Gabriel, su gerente, ha sido entrevistado por la televisión japonesa, la revista Times y está acostumbrado a que se haga referencia a su empresa como un caso de éxito de la nueva economía. Tal vez por eso, todavía no se pueda llegar a creer la denuncia que ha interpuesto la Agencia Tributaria acusándole de presunto delito de contrabando.
'Es ridículo', reflexiona Gabriel, 'no entiendo que el Gobierno pueda estar por un lado promoviendo el uso de nuevas tecnologías, la venta de ordenadores y móviles, y Hacienda, por otro lado, esté vetando la venta de determinados productos por la Red', opina Gabriel, que pese a su tono optimista no puede dejar traspasar cierta preocupación.
La Lotería Nacional es considerada como un género estancado y, por lo tanto, las ventas de este producto en el extranjero deben seguir un procedimiento marcado por la ley, que exige que la compra se realice a través de una entidad de crédito que ejerza la funciones delegadas del Banco de España.
La Bruixa d'Or, cuyas ventas en línea alcanzaron 7,8 millones de euros el año pasado, cuenta con clientes en otros países, como Alemania, gracias a Internet, por lo que parece que se ha saltado esta ley. 'Primero tendrán que demostrar que he vendido décimos en el extranjero por valor de 18.000 euros', señala Gabriel, cantidad a partir de la cual puede considerarse contrabando la venta exterior de Lotería, según la ley.
El caso está ahora en manos de la fiscalía, que deberá decidir si acepta la acusación de la Agencia Tributaria. Gabriel confía en que su caso no llegue a los tribunales, y compara su situación a las administraciones de lotería que están en la frontera con Andorra, Francia o Portugal a las que acuden un importante número de extranjeros a comprar boletos.
'Lo malo de ser el primero en un campo totalmente nuevo es que siempre se está en el punto de mira. Espero que al menos todo esto sirva para que se regularice las materias relacionadas con el juego en el extranjero', se consuela Gabriel.
Pero este pionero de la Red no se ha encontrado sólo en su particular batalla. Desde que la acusación de Hacienda saltó a la luz pública, La Bruixa d'Or no ha dejado de recibir muestras de solidaridad y apoyo a su sistemas de ventas de sus clientes y otros internautas.
Tanto es así que sus pedidos vía web se han multiplicado. Si normalmente en los meses de verano no recibía más de 30 solicitudes al mes, ahora está recibiendo 400 encargos.