Vodafone agrava la crisis del UMTS al frenar sus planes en Alemania
La operadora de telefonía británica Vodafone ha decidido retrasar el lanzamiento de su servicio de telefonía móvil de tercera generación (UMTS) en Alemania hasta principios de 2003, cuando tenía previsto hacerlo en otoño de este año, según explicó el presidente de la filial alemana, Juerguen Von Kuczkowski.
'A principios del año que viene lanzaremos el UMTS para una parte de nuestros empleados y algunos de nuestros grandes clientes', declaró el presidente de D2 al diario alemán Die Welt. Posteriormente, la operadora quiere iniciar el lanzamiento comercial de los servicios UMTS 'relativamente rápido'.
Von Kuczkowski justificó el retraso por los problemas técnicos que han sufrido las compañías encargadas del equipamiento de la red. Así, reconoció que Vodafone no está satisfecho con un cierto número de normas técnicas y reveló que Motorola y Nokia no pueden ceñirse a los calendarios previstos y retrasan 'una y otra vez' la entrega de la tecnología.
La decisión de Vodafone, que acapara junto a Deutsche Telekom y su filial de telefonía móvil, T-Mobile, el 80% del mercado alemán, se producen en un momento de gran incertidumbre sobre el futuro del UMTS.
Tras el empuje inicial del sector, la mayoría de las operadoras han tenido que retrasar el arranque de sus servicios.
Así, Orange Sverige, la filial sueca de Orange, ha solicitado un plazo adicional de tres años para construir su red. Además, la operadora alemana Quam, participada por Telefónica y Sonera, anunció en julio la congelación de sus inversiones en UMTS y el miércoles a conocer la supresión de 800 de sus 900 empleos.
En España, el cuarto operador, Xfera, ha congelado sus planes a la espera de que se clarifique la situación. Los otros tres operadores han pedido al Gobierno que levante las exigencias de plazo para la puesta en servicio.
Demanda contra France Télécom
Un grupo de ayuntamientos franceses ha presentado en Bruselas una demanda contra las exenciones fiscales de las que se ha beneficiado France Télécom desde 1990 en los impuestos locales, lo que podría representar para ese periodo 2.400 millones de euros, informa el diario Les Echos. La Asociación de Administraciones Territoriales por la Vuelta de la Tasa Profesional de France Télécom y de la Poste al Derecho Común ha presentado una denuncia por ayuda de Estado al operador de telecomunicaciones, y reclama que los ayuntamientos puedan disponer de la recaudación de la tasa que pagan las empresas implantadas en territorio municipal.
El propio Ministerio de Economía reconoce, en un informe citado por el diario, que 'la normalización de las condiciones de imposición de la tasa profesional supondría un aumento de imposición de 198 millones' anuales para France Télécom. La Dirección de la Competencia de la Comisión Europea no ha tomado una decisión para abrir una investigación formal, aunque ha enviado una carta al Gobierno francés en la que dice que el régimen del que goza podría constituir una subvención pública.