Japón reconoce que la crisis bursátil pone en duda la recuperación
El Gobierno japonés ve ahora con más cautela el panorama económico y reconoce en su informe mensual sobre la economía que 'la fuerte caída global de las Bolsas y del dólar ha incrementado la incertidumbre en el mundo y en Japón'.
Tras haber elevado durante cuatro meses consecutivos su valoración de la economía, el Ejecutivo nipón decidió mantenerla invariable en el informe de agosto, reflejando las preocupaciones sobre los acontecimientos que se viven en los mercados. Aun así, el mensaje sigue siendo optimista: 'La economía se mantiene en una situación difícil, pero hay signos de recuperación en todas las áreas'.
Las dudas de la Administración nipona coinciden con un informe del Fondo Monetario Internacional (FMI), que señala que hay 'considerables riesgos' para Japón, dada la falta de avances en el saneamiento del sector bancario. El Fondo prevé que, pese al sorprendente crecimiento del 5,7% en el primer trimestre del año, el PIB japonés cierre 2002 con una contracción del 0,5%.
Las previsiones de inversión empresarial son muy malas. El Gobierno japonés pronosticó en su informe que los pedidos de maquinaria, un indicador del gasto de las empresas, caerán un 3,9% en este trimestre, después de haber crecido un 7,1% en el trimestre anterior.
Las expectativas desde el lado doméstico son pésimas. El paro está en el 5,4%, próximo al máximo histórico, mientras que los precios registran 33 meses consecutivos de contracción.