Rusia y la OPEP llegan a un acuerdo para evitar una guerra de precios del crudo
El Gobierno ruso y la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) llegaron ayer a un acuerdo informal para evitar una guerra de precios del barril, que podría hundir la cotización del crudo en un momento de incertidumbre sobre la recuperación de la demanda.
El ministro ruso de Energía, Igor Yusufov, declaró ayer, tras entrevistarse en Moscú con el secretario general de la OPEP, Álvaro Silva, que 'no hay ninguna razón para hablar de guerra de precios bajos entre Rusia y la OPEP'. Yusufov señaló que su Gobierno 'está listo para cooperar con el cartel cuando sea necesario'.
Rusia acordó en diciembre reducir sus exportaciones de crudo 150.000 barriles diarios durante seis meses. Ya en febrero surgieron las primeras reticencias de las petroleras privadas rusas, que controlan la producción, a cumplir el acuerdo. La cooperación rusa y de otros cuatro países, que totalizaban una reducción de 500.000 barriles diarios, concluyó definitivamente en junio, pese a los intentos del cartel por prolongarla. Silva declinó comentar si había solicitado a Rusia un nuevo acuerdo de restricciones. Rusia ha aumentado este año su extracción un 8,3%, hasta 7,42 millones de barriles diarios, y está a la cabeza de la producción mundial, junto con Arabia Saudí y EE UU. El país árabe y el europeo compiten por liderar la exportación, mientras que EE UU importa el 56% del petróleo que consume.
Los 10 países de la OPEP (Irak está sometido al control de la ONU) que aprobaron en diciembre una restricción total de 1,5 millones de barriles diarios incumplen sus propias cuotas, según señalan fuentes ajenas al cartel.
Aun así, la OPEP produce al ritmo más bajo en 10 años, lo que le ha llevado a perder cuota de mercado en favor de otros productores, especialmente Rusia. El cartel no está dispuesto a seguir perdiendo clientes en la defensa del precio, el brent cotiza a 25 dólares por barril, un nivel similar al del año pasado. Sin embargo, Silva ha querido limar las asperezas con Rusia, ya que su colaboración es esencial para la buena salud del negocio.