Las cajas mejoran sus expectativas de resultados por las menores provisiones
La mejora del margen financiero y las expectativas de menores gastos y menores saneamientos llevarán a las cajas de ahorros a mejorar sus resultados en los próximos meses a pesar de que la desaceleración económica ya se está traduciendo en un menor crecimiento del volumen de negocio. Esta es una de las principales conclusiones de la encuesta de expectativas de cajas de ahorros elaborada por la Confederación Española de Cajas de Ahorros (CECA) en el segundo trimestre del año.
En concreto, el índice de expectativas de resultados avanza cinco puntos con respecto al elaborado en el primer trimestre. La mejora se basa en el considerable avance de las previsiones de evolución del margen financiero, rúbrica en la que este índice pasa de un valor de -7 a uno de 18 puntos.
Además, las cajas están convencidas de que el ajuste general de gastos y las menores necesidades de provisiones mitigarán los impactos negativos que tienen en su cuenta la desaceleración del negocio y la crisis de los mercados.
En general, la opinión de las cajas sobre el entorno económico es mejor que la que tenían a principios de año, a pesar de que el Gobierno se ha visto obligado a revisar a la baja sus previsiones económicas por el agravamiento de la crisis internacional. En el segundo trimestre, sólo tres cajas creen que la economía crecerá menos en los próximos meses, frente a 19 que mantenían esa opinión en el trimestre anterior.
Los resultados hasta marzo ya estuvieron marcados por un moderado crecimiento de los gastos y unas menores dotaciones al fondo de cobertura estadístico para insolvencias (Foncei) en comparación con las realizadas el mismo periodo del año anterior. La necesidad de dotar este fondo castigó duramente la cuenta de resultados de las cajas en 2001, pero ha permitido a estas entidades prepararse para los previsibles repuntes de morosidad.
Uno de los aspectos más destacados de esta encuesta es precisamente la percepción que tienen las cajas sobre la evolución de la morosidad que, pese a seguir en zona de mínimos, empieza a preocupar a las entidades. Es, de hecho, la rúbrica de la encuesta que más empeora. Así, un total de 25 cajas consideran que la importancia de la morosidad en relación con el balance aumentará en los próximos meses, frente a 15 que estiman que se mantendrá en términos similares y sólo cuatro que consideran que disminuirá. También empeoran las expectativas de liquidez, al pasar de -11 puntos en el anterior estudio hasta -16 en la última encuesta.
El año pasado también fue excepcional en gastos porque los bancos y las cajas tuvieron que afrontar buena parte de la factura de la transición al euro, un lastre con el que no cuentan en 2002.
La encuesta permite también conocer cuáles son las expectativas de las cajas en cuento a la evolución de productos. La conclusión más importante es que estas entidades prevén un notable aumento de la competencia, sobre todo en la captación de depósitos. En total, 36 cajas creen que habrá más competencia mientras que seis opinan que se mantendrá y sólo tres afirman que disminuirá. La lucha por la captación de depósitos se producirá en un entorno de menor demanda por parte de los clientes, de acuerdo con las respuestas obtenidas en la encuesta. Sólo 15 cajas opinan que habrá aumento de la demanda, frente a 26 que consideran que se mantendrá y tres que prevén un descenso. Sólo 11 cajas creen que la demanda de fondos de inversión y pensiones aumentará, frente a las 25 que consideran que se mantendrá y ocho que opinan que disminuirá.
En cuanto al activo, mejora el índice de demanda de préstamos hipotecarios respecto a la anterior encuesta, pero todavía ocho cajas consideran que la demanda aumentará, frente a 24 que dicen que se mantendrá y 12 que pronostican caídas.