Baleares exige a Economía un plan para el transporte de gas a las islas
En Baleares, el Gobierno regional y Endesa, que suministra la electricidad a la región, confiaban hace unos meses en que el Gobierno aprobaría en el plan de infraestructuras eléctricas y gasísticas la opción de cómo llevar el gas natural al archipiélago. Sin embargo, según el propio secretario de Estado de Energía, José Folgado, la decisión es un 'tema abierto y llevará tiempo'.
Fuentes de Gesa-Endesa reconocieron que, desde su central en Madrid, les había llegado el mensaje de que la decisión se iba a demorar. Todo apunta, pues, a que en el documento que apruebe el Gobierno podría no incluirse la solución. Según Economía, el plan podría verse en el último Consejo de Ministros antes de las vacaciones. Sin embargo, estas mismas fuentes han declarado que el documento debe ser remitido previamente a la Comisión Nacional de la Energía, que tiene 15 días para emitir su informe. Según un portavoz de la CNE, el Gobierno no les ha enviado todavía el plan, lo que podría retrasar la aprobación por parte del Consejo de Ministros a septiembre.
En el documento que presentó Economía al Congreso en febrero se barajan tres opciones para llevar al gas natural a Baleares: un gasoducto desde Valencia; dos regasificadoras (una en Mallorca y otra en Ibiza); y la tercera, una regasificadora en Mallorca y un gasoducto entre Mallorca e Ibiza.
El retraso en la decisión por parte del Gobierno supone un abultado coste para Endesa. La eléctrica ha puesto recientemente en funcionamiento una central de ciclo combinado en Son Reus, en Mallorca, con la convicción de que el gas natural llegaría en 2005. Para cumplir con esa fecha, la decisión de si finalmente se opta por un gasoducto o por regasificadoras debería incluirse en el plan de infraestructuras.
Según Jaime Reguart, director general de Gesa-Endesa, si en 2005 no está disponible el gas natural en Mallorca, supondrá un coste a la empresa de 25 millones de euros al año. Este dinero incluye el sobreprecio que supone seguir con el gasóleo y el mayor coste de mantenimiento de los equipos por utilizar este combustible en lugar de gas natural. Y este coste, según Endesa, aumentaría en 2010 a 50 millones anuales.
Sin embargo, la preocupación ya no es sólo por el retraso en la llegada del gas natural a las islas. Para José Folgado, no sólo se discute entre gasoductos o regasificadoras, sino que el Gobierno está estudiando dejar sin gas natural a Baleares. Entre las alternativas que se están estudiando se incluye un cable submarino que lleve la electricidad desde la Península. 'Hay otras regiones en España que no tienen gas natural', según Folgado.
Reguart se muestra especialmente preocupado ante esta posibilidad, pues sus informaciones son que, a pesar de llegar con retraso, no se cuestiona la utilización del gas natural en las islas.
De hecho, entre las recomendaciones de la subcomisión del Congreso para el seguimiento de las infraestructuras energéticas aprobadas el pasado 26 de junio, en la número 6 se dice: 'El documento final de planificación debe recoger, como objetivo explícito, la utilización universal del gas natural como sector energético emergente y que, como consecuencia, se ponga a disposición de todas las comunidades autónomas, incluyendo las extrapeninsulares'.