El Banco de Japón confía en el alza de las exportaciones pese a la fortaleza del yen
El Banco de Japón (BOJ, en sus siglas en inglés) mejoró ayer por quinto mes consecutivo su valoración de la economía y aseguró que la situación 'se ha estabilizado', gracias al 'ascendente ímpetu de las exportaciones y de la producción'. La autoridad central nipona cree que la fortaleza de la exportación ha puesto al país a las puertas de salir de la tercera recesión que sufre en una década.
La economía creció un 1,4% en el primer trimestre del año, pero los analistas achacaron el dato positivo al inesperado auge exportador. Datos como lo caída del 3,2% de las inversiones empresariales daban poco margen para el optimismo. En su informe mensual, el banco reconoce que 'la inversión pública y la demanda privada mantendrán su tendencia a la baja en el futuro inmediato'.
La reciente caída del dólar también es observada con recelo por los expertos japoneses. La divisa estadounidense se ha deteriorado a toda velocidad, pasando en dos semanas de 118,5 yenes por unidad a tocar los 115,6. El temor a una intervención masiva del banco central ha conseguido moderar la venta de dólares, aunque la divisa estadounidense sigue en el entorno de los 116,2 yenes. Las autoridades niponas temen que la fortaleza del yen haga descarrilar la esperada recuperación al perder competitividad los productos japoneses frente a los de sus rivales asiáticos.
El BOJ también reconoce que los problemas laborales persisten. 'La mejora de los beneficios empresariales y del sentimiento empresarial repercutirá marginalmente en las condiciones de trabajo', ya que 'las compañías mantienen su apuesta por la reducción de gastos en personal y, en consecuencia, los ingresos domésticos continuarán decreciendo notablemente'. En estas circunstancias, el instituto emisor reconoce que las condiciones de empleo y salarios son 'severas'.
Otro factor de inestabilidad es la incertidumbre provocada por la caída bursátil y las dudas sobre la recuperación económica en EE UU, que 'fácilmente podrían tener una influencia negativa en la economía'.