La CE consulta sobre el derecho de los jefes a controlar el correo electrónico
¿Tienen los jefes derecho a leer los mensajes de correo electrónico que sus empleados mandan o reciben? ¿Confían los consumidores en que sus datos personales serán utilizados correctamente? ¿Están las empresas desbordadas por las peticiones de acceso a las bases de datos? æpermil;stas son algunas de las dudas que la CE pretende despejar consultando a empresas, Gobiernos y particulares sobre la necesidad de modificar la directiva de protección de datos.
La CE quiere revisar la directiva de protección de datos para asegurarse de que está cumpliendo los objetivos fijados. Así lo ha asegurado el comisario europeo de mercado interior, Frits Bolkestein. Para conseguirlo, ha puesto en marcha una consulta en su página web en la que anima a empresarios y trabajadores a enviar opiniones sobre la protección de la intimidad en la UE. Con estas respuestas la CE elaborará su primer informe sobre la aplicación de la directiva de protección de datos.
Esas opiniones, que se podrán enviar hasta el próximo día 15 de septiembre, contribuirán a los debates que se efectuarán con motivo de la conferencia sobre protección de datos que la Comisión organizará los días 30 de septiembre y 1 de octubre. Posteriormente, la Comisión elaborará este año su primer informe sobre la aplicación de la directiva e incluirá sugerencias para su mejora.
La CE recuerda que son muchas las situaciones en las que las empresas necesitan procesar y retener datos personales. Las empresas necesitan los datos bancarios de sus empleados para pagarles; los médicos, informes de sus pacientes; los comercios, direcciones de sus clientes para enviar productos... Pero la Comisión quiere ahora conocer de los implicados cómo les afecta la directiva de protección de datos. El comisario europeo de mercado interior asegura que, 'como la protección de la vida privada es inseparable de la protección de datos personales, debemos vigilar la aplicación de la directiva relativa a la protección de datos para asegurar que responde a los intereses de nuestros ciudadanos, empresas, autoridades públicas y otras partes interesadas'.
Protección de datos
La directiva relativa a la protección de datos tiene en cuenta estas necesidades y ofrece a los ciudadanos 'la mejor protección posible de su vida privada', explica Bolkestein.
La norma europea entró en vigor en octubre de 1998 y ha sido traspuesta a los ordenamientos jurídicos de todos los Estados miembros excepto Irlanda y Luxemburgo. La norma exige que los datos sean utilizados de manera legítima y para los propósitos para los que fueron obtenidos. Además, los datos deben ser relevantes, no excesivos, y no deben conservarse más tiempo del que es necesario para su propósito original legítimo.
Deben también establecerse medidas de control sobre los datos y es necesario permitir a los interesados que realicen las rectificaciones pertinentes o, incluso, que puedan solicitar la eliminación del fichero que les atañe. Los datos personales no pueden transferirse a países o territorios ajenos al área económica europea, a menos que el país de destino asegure 'un adecuado nivel de protección'. La directiva también establece que cada Estado miembro deberá nombrar una autoridad competente sobre el control del cumplimiento de esta norma europea.