La apreciación del euro aumenta casi 400 millones la carga de la deuda rusa
La apreciación de la moneda única no gusta a todos en Europa. El ministro ruso de Finanzas, Alexei Kudrin, advirtió ayer de que la revalorización del euro podría acarrear un coste extra de 400 millones de dólares (396 millones de euros) para las arcas de Moscú en concepto de servicios de la deuda, ya que la mayor parte de la misma está denominada en euros.
El ministro de Desarrollo Económico y Comercio, German Gref, estimó que, cada céntimo que se aprecia el euro frente el dólar, la deuda rusa sube 100 millones de dólares (99 millones de euros). La carga de la deuda en 2002 es de aproximadamente 14.200 millones de dólares (14.060 millones de euros).
Los ingresos petroleros, que se obtienen en dólares, son la principal fuente de ingresos fiscales para el Gobierno ruso. La combinación de ingresos en dólares depreciados y pagos en euros revalorizados preocupa especialmente a la Administración de Moscú.
La caída de la divisa estadounidense también perjudica al bolsillo de los ciudadanos, que tienen gran parte de sus ahorros en dólares. Los rusos son los que tienen mayor liquidez de dólares fuera de EE UU, aproximadamente 70.000 millones (69.300 millones de euros). Alexei Volin, número dos de la presidencia, quiso enviar ayer un mensaje de calma y advirtió a la población de que 'un cambio masivo de dólares por euros sería el error más grande'. El propio Kudrin señaló que es 'improbable' que el euro mantenga por mucho más tiempo su actual fortaleza respecto al dólar.
Otros problemas complican la gestión del presidente Vladimir Putin. Un alto cargo del Ministerio de Finanzas declaró ayer a la agencia rusa Interfax que los ingresos fiscales estaban creciendo muy por debajo de lo esperado, principalmente a consecuencia de la caída del precio del petróleo. El crudo ruso cotizó en la primera mitad del año a un 13% menos que en 2001.
El Ministerio de Finanzas ha reconocido que los ingresos del fondo especial con el que el Ejecutivo planea hacer frente a las obligaciones de la deuda en 2003 estarán un tercio por debajo de lo previsto. El servicio de la deuda ascenderá el año que viene a 17.000 millones de dólares (16.830 millones de euros).
Pero la apreciación de la moneda única también tiene sus ventajas. Las tarifas que se cobran a las importaciones están fijadas en euros, lo que, a juicio de los analistas, compensará las pérdidas provocadas por el incremento de los pagos de la deuda. 'Desde el punto de vista del presupuesto, los efectos del euro son neutrales', declaraba ayer a Reuters la economista jefe de Alfa Bank, Natalya Orlova.
Rusia intentará obtener nuevos ingresos del negocio petrolero. La semana pasada, el Gobierno aprobó por decreto la subida de los impuestos que cobra a la exportación de crudo y sus derivados. Una medida que entrará en vigor el 1 de agosto y que, en el caso del diésel y la gasolina, supone un aumento del 40%. La Administración trata de compensar así los menores ingresos provocados por la bajada del precio y por la restricción de las exportaciones, impuesta en el primer semestre del año en virtud de un acuerdo con la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP).