Fracasan las negociaciones entre Babcock Borsig y sus bancos acreedores
Las negociaciones entre los bancos acreedores y el insolvente fabricante de maquinaria Babcock Borsig fracasaron hoy, según confirmó el presidente del estado federado de Renania del Norte-Westfalia, Wolfgang Clement.
Varios sindicatos alemanes, entre ellos IG Metall, confirmaron el fracaso de las negociaciones a pesar de los esfuerzos del estado de Renania del Norte-Westfalia y el plantel de la empresa. El constructor germano tiene mayores dificultades financieras de lo que se ha considerado hasta ahora, que pueden ascender hasta los 840 millones de euros (819 millones de dólares), aunque la compañía ha rehusado comentar esta información.
Los bancos Deutsche Bank y West LB estarían dispuestos a participar en la nueva estrategia, pero los otros cuatro principales acreedores implicados, Commerzbank, Dresdner bank, HypoVereinsbank y BHF-Bank, se han negado hasta el momento.
Babcock señaló que a pesar del fracaso "definitivo" de las negociaciones, ha solicitado su puesta en recuperación judicial. La compañía tuvo que declararse en suspensión de pagos obligada por la legislación alemana, que obliga a un grupo a este procedimiento si no puede pagar los salarios de sus trabajadores.
UGT pide a la SEPI una reunión urgente ante las incertidumbres sobre el futuro de Babcock & Wilcox
Metal Construcción y Afines (MCA) de UGT ha pedido a la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI) la convocatoria de una reunión urgente ante las incertidumbres sobre el futuro de Babcock & Wilcox, después de que la empresa matriz, Babcock Borsig, suspendiera pagos.
El responsable del sector bienes de equipo en MCA-UGT, Ambrosio Fernández, ha pedido a la sociedad presidida por Ignacio Ruiz Jarabo una reunión para analizar las posibles repercusiones que pueda tener la situación de la empresa alemana sobre su filial española.
El sindicato considera que la suspensión de pagos en principio no debería afectar financieramente a Babcock & Wilcox, cuyas finanzas están saneadas. No obstante, expresó su preocupación por que la situación de la matriz pueda implicar la suspensión de pedidos a la empresa vasca, lo que la situaría en una "difícil" posición.