La llegada de Fourtou a la presidencia de Vivendi calma al mercado
En los dos últimos días, la Bolsa de París mostró una gran inquietud con respecto a Vivendi, cuyas acciones cayeron ayer un 21,91% y un 25,52% el día anterior. A la noticia del intento de 'maquillar' las cuentas del grupo el pasado otoño, con la ayuda de sus gabinetes de auditores, incluido Arthur Andersen (ya implicado en el escándalo de Enron), se unía la rebaja, por parte de la agencia Moody's, de la calificación de su deuda a largo plazo al rango de "bonos basura".
La recuperación de hoy parece señal de buena acogida de los inversores, que en algunos momentos de la mañana auparon la acción hasta subidas de un 17%, a los cambios en la presidencia del grupo de comunicación adoptados anoche por su consejo de administración, que se reunió en sesión extraordinaria.
Vivendi Universal nombró máximo ejecutivo a Jean-René Fourtou, de 63 años, para sustituir a Jean-Marie Messier, que también decidió crear un comité financiero, presidido por el fundador de la aseguradora AXA Claude Bébéar, quien ingresa en el consejo, y un comité estratégico, encabezado por Henri Lachman, que ya era miembro del consejo y preside la sociedad Schneider Electric.
El segundo grupo mundial de comunicación indicó que dará la prioridad "a la transparencia financiera y a solución de los problemas de tesorería a corto plazo".
Futuras estrategias
En los últimos días, los analistas han barajado el posible desmantelamiento de Vivendi mediante una venta de activos, para hacer frente a los problemas de deuda y liquidez. Una de las posibilidades que se estudian es la separación de los negocios estadounidenses -los estudios de cine Universal, música y editoriales- y de los franceses -la filial de agua y saneamiento Vivendi Environnement, la televisión de pago Canal+ y el operador de telefonía móvil Cegetel-.
"Pase lo que pase, el grupo Canal + no debe ser desmantelado", dijo su presidente, Xavier Couture, en una entrevista con el diario 'Le Parisien'. Couture señaló que "enormes errores de gestión fueron cometidos en esta empresa" antes de su llegada y abogó para que cesen las "guerras de trincheras" entre la dirección y los accionistas, que han resultado "ruinosas" para el grupo de televisión de pago. Varios grupos ya han expresado su interés por comprar Canal + si se pusiera a la venta, entre ellos la cadena M6, TF1 y Pathé.
El Gobierno francés, preocupado por el futuro de Vivendi
El ministro francés de Cultura y Comunicación, Jean-Jacques Aillagon, se declaró hoy "preocupado" por la posibilidad de un desmantelamiento de Vivendi Universal y el futuro de su filial de televisión de pago Canal +. "Este Ministerio no puede estar indiferente a los riesgos que podrían afectar al grupo y su eventual desmantelamiento", indicó Aillagon ante la prensa, al recordar que Vivendi está presente en la prensa, el cine, la edición y la televisión, que son "un elemento esencial del patrimonio nacional". Señaló además que ha escrito al nuevo presidente del grupo, Jean-René Fourtou, para mostrarle su punto de vista tras el reemplazo de Jean-Marie Messier.