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Política

Aznar contrapone la 'coherencia' del PP a la 'división' del PSOE

El presidente del Gobierno, José María Aznar, optó ayer por aludir de refilón el enfrentamiento que libran en el PP su secretario general, Javier Arenas, y el ministro de Fomento, Francisco Álvarez-Cascos. Aznar contrapuso la 'coherencia' que, en su opinión, ejerce el PP a la 'división' que vive el PSOE.

El presidente aprovechó la clausura de la convención en la que el PP hizo balance del semestre europeo para recordar a sus dirigentes que son un 'referente' para Europa. 'Ni chulos ni arrogantes. En Portugal, Italia, Alemania... quieren seguir el ejemplo del PP', dijo.

En referencia al PSOE pero también en clave de mensaje interno, aseguró que el PP 'tiene un único proyecto, no 17 ni 52'. 'Tampoco intentamos la confederación de partidos de la Corona de Aragón', dijo en tono de burla, saliendo al paso del lobby opositor al PP formado por los socialistas de Aragón, Baleares, Cataluña y Valencia.

Aznar insistió en la importancia que tiene para el PP 'mantener la coherencia interna entre nosotros mismos y con nuestro congreso' para encarar con éxito las elecciones generales de 2004. 'En enero', recordó, 'nos paseábamos por el cielo y ahora parece que rasamos la tierra. Ni lo uno ni lo otro', comentó.

Aznar también emplazó al PP a ampliar su apoyo social. En los papeles que maneja para el debate del estado de la nación ha leído que el Gobierno se ha quedado solo en 14 de 1.400 votaciones parlamentarias, hecho que, a su juicio, demuestra su carácter dialogante.

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