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Coyuntura

EE UU sufrió en abril un déficit comercial récord de 37.800 millones

Las importaciones crecieron un 4% el cuarto mes del año, hasta los 116.000 millones de dólares (121.800 millones de euros), mientras que las exportaciones mejoraron un 2%, hasta los 80.100 millones de dólares (84.100 millones de euros). La subida del déficit comercial superó todas las expectativas de los analistas que apuntan a que la mejora refleja la buena salud del consumo interno, que continúa tirando de la economía estadounidense.

Los analistas habían previsto que el déficit comercial fuera de 32.480 millones de dólares (34.100 millones de euros).

'La buena noticia es que mayores importaciones y exportaciones sugieren una demanda fuerte en EE UU y en el resto del mundo', afirma Christopher Low, economista jefe de FTN Financial en Nueva York.

Uno de los países en los que se refleja la mejora del consumo de EE UU y, consecuentemente, el aumento de las importaciones es Japón, que aumentó por primera vez en términos interanuales (un 5,5%) sus ventas al país asiático. Las autoridades niponas han declarado que la recuperación de su economía pasa por el repunte económico en EE UU.

El alza de las importaciones hubiera sido incluso mayor sin la depreciación del dólar, cuya cotización ha caído un 3% desde enero frente a una canasta de monedas de los principales socios comerciales de EE UU.

En cuanto al petróleo, la primera economía del mundo importó 303 millones de barriles en abril, frente a los 267,3 millones del mes anterior. En valor, la importación de crudo alcanzó en mayo los 6.800 millones de dólares (7.140 millones de euros), con el precio del barril en 22,48 dólares, frente a los 19,18 dólares de abril.

El déficit por cuenta corriente también registró un nuevo récord en el primer trimestre del año y se situó en los 112.500 millones de dólares (118.000 millones de euros), frente a la cantidad revisada de 95.100 millones de dólares (100.000 millones de euros) del últimos trimestre del año pasado.

Este dato también superó las previsiones de los analistas, que apuntaban a un déficit de 107.000 millones de dólares (112.300 millones de euros).

El elevado déficit por cuenta corriente es una de las preocupaciones del Gobierno de EE UU y de los analistas, pues una caída de la Bolsa y un dólar más bajo aún podrían dificultar la atracción de suficientes inversiones extranjeras para compensar dicho déficit.

De momento, la recuperación de la economía estadounidense sigue reflejándose en muchos indicadores. El índice de indicadores adelantados, que muestra las perspectivas para los próximos meses, mejoró un 0,4% en mayo, reflejando que 'la economía mejorará en la segunda mitad del año', según afirmó Ken Goldstein, economista jefe del Conference Board, que realiza el índice. Cinco de los 10 componentes mejoraron. Esta subida de mayo sigue a un retroceso del 0,3% del mes anterior.

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