El Plan de Cetarsa pretende estabilizar el sector del tabaco
La Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (Sepi) y la Compañía Española de Tabaco en Rama, S.A. (Cetarsa) se disponen a aplicar inmediatamente una reestructuración que propone a los 790 trabajadores de la provincia cacereña prejubilaciones para los mayores de 56 años, bajas incentivadas, recolocaciones y empleos en nuevas actividades empresariales. En el caso de Cáceres se podrán recolocar a todos los trabajadores afectados. Además, la SEPI, a través de la sociedad de capital-riesgo SODIEX, destinará un importe inicial de tres millones de euros para apoyar iniciativas privadas de creación de nuevas industrias en Extremadura.
Según responsables de ambas compañías, el plan busca concentrar la producción para mejorar la rentabilidad, dar estabilidad y continuidad a la empresa y hacerla competitiva. El vicepresidente de la Sepi, Pablo Oliveira Massó, explicó hoy en Cáceres que la reestructuración de la empresa era necesaria para adecuarla a las condiciones del mercado. Oliveira manifestó que Cetarsa mantenía una situación de "sobrecapacidad" y que el plan dar estabilidad a los productores, ya que la empresa es el primer transformador en España del sector del tabaco y el elemento que da estabilidad y garantía a los tabaqueros de que su tabaco será vendido, transformado y distribuido.
Oliveira Massó destacó el consenso y respaldo obtenido para el plan por parte de los centros de trabajo, el comité intercentros y sindicatos representantes de los trabajadores.
En cuanto a la privatización de la empresa, el vicepresidente de la SEPI manifestó hoy que la reestructuración de Cetarsa es un proceso "independiente" y añadió que la decisión "está por tomar; no solo no hay calendario, es que no hay ni decisión tomada todavía".