Los comités de empresa de Opel y Fiat rechazan la posible compra de Fiat Auto por General Motors
Los comités de empresa de Opel y de Fiat han expresado su rechazo a una eventual adquisición de Fiat Auto por parte del grupo estadounidense General Motors, matriz de Opel y propietario del 20% de la división automovilística del consorcio italiano.
En un comunicado conjunto, la representación de los trabajadores manifiesta su "profunda inquietud" en relación con los rumores sobre una eventual adquisición de Fiat por parte de General Motors, que "no crearía sino dificultades y no resolvería ningún problema". A su juicio, es negativo combinar estructuras débiles antes de finalizar su reestructuración.
La dimisión del consejero delegado de Fiat, Paolo Cantarella, anunciada ayer, ha disparado los rumores sobre la posibilidad de que General Motors se haga con el 80% de Fiat Auto que no posee y sobre el que dispone de una opción de compra desde 2004.
Fiat y Opel atraviesan por una complicada situación financiera. La compañía italiana perdió 429 millones de euros hasta marzo en su división de automóviles, mientras que la firma alemana cerró 2001 con pérdidas de unos 700 millones de euros.
Standard & Poor's mantiene su calificación sobre la deuda a corto plazo de Fiat
La posible adquisición de Fiat Auto por parte de General Motors genera ciertas incertidumbres en torno a la multinacional de Turín. æpermil;sa es la advertencia de Standard & Poor's. La agencia de calificación financiera ha decidido mantener su calificación sobre la deuda a corto plazo del grupo italiano Fiat.
Standard & Poor's señala que las medidas adoptadas recientemente por Fiat para reestructurar su endeudamiento tendrán un efecto en su deuda y en su §cash flow§ durante este año. No obstante, indica que podría revisar a la baja su calificación si el grupo no consigue su objetivo de reducir la deuda a 3.000 millones de euros al cierre del ejercicio.
La calificación asignada a Fiat refleja los objetivos de la compañía para reducir su endeudamiento, como la emisión de 3.000 millones de euros en obligaciones convertibles, la salida a bolsa de Ferrari o la disminución de su participación en Italenergia.