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Cajas

Las seis cajas andaluzas buscan alianzas en varias áreas de negocio

Las seis cajas andaluzas han entrado este año en una nueva etapa de normalidad institucional y cooperación después de varios años de guerra abierta entre entidades y de enfrentamientos entre éstas y la Administración andaluza. Aunque las reticencias a las fusiones que persigue la Junta se mantienen, las cajas han accedido al menos a entablar contactos periódicos en busca de proyectos comunes.

La Junta de Andalucía, impulsora de estas reuniones al máximo nivel, pretende que las cajas superen sus diferencias colaborando en proyectos concretos con la confianza de que después del estrechamiento de relaciones las fusiones vendrán solas. Este es el camino elegido ahora por el Gobierno andaluz para lograr que Andalucía llegue a tener una única caja.

En los primeros encuentros, según explica José María Bueno Lidón, presidente de El Monte, se han fijado cinco grupo de trabajo: compras y servicios comunes, política comercial, informática, empresas participadas y servicios financieros. Más adelante, tendrá que concretarse el instrumento de colaboración más adecuado para amparar los eventuales acuerdos concretos.

Abrir oficinas conjuntas

El presidente de Unicaja y de la federación andaluza de cajas, Braulio Medel, ha propuesto para ello la creación de un banco andaluz, una iniciativa sobre la que no hay consenso por el momento. Bueno admite que en algunos de estos campos será fácil alcanzar acuerdos que compensen a las seis cajas andaluzas, como es el caso de las compras comunes, que pueden ahorrar costes. Otros capítulos, aquellos que afecten a la territorialidad de cada entidad, serán más polémicos.

En cualquier caso, el presidente de El Monte espera que haya acercamientos en puntos como la apertura de oficinas conjuntas en el exterior o en las participaciones empresariales. En este sentido, recuerda que las cajas andaluzas disponen en conjunto del 20% de las acciones de Koipe, la primera aceitera española, y que muy bien podrían sindicar esta participación, adquiriendo así poder de decisión en la empresa.

Una vez aceptada por las seis cajas la nueva política de colaboración y tras quedar definidos los campos de actuación, los responsables de las entidades se volverán a reunir en este mes de junio para entrar ya a analizar proyectos concretos.

Para Bueno, esta nueva política de colaboración es muy positiva, aunque advierte que para superar el problema de dimensión que tiene el sistema financiero andaluz serán necesarias nuevas fusiones al margen de la sevillana que su entidad protagoniza con San Fernando. Teniendo en cuenta las ampollas que las fusiones levantan en más de una provincia, como Granada o Córdoba, se va imponiendo la tesis de que no habrá nuevos movimientos de integración hasta después de las elecciones municipales del año que viene.

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