Unió reelige a Duran Lleida y avala la política de pactos con Aznar
El 22 Congreso de Unió Democràtica (UDC) reeligió ayer a Josep Antoni Duran Lleida como presidente del comité de gobierno con un contundente 91,8% de los votos que supone un aval a su defensa de la política de pactos con el PP. Aunque el líder democristiano no escatimó ayer críticas a la política antiautonomista del Gobierno, definiendo como 'intolerables' las posturas que defiende al respecto la presidenta del Senado, Esperanza Aguirre, el informe de gestión presentado el sábado estuvo plagado de guiños e incluso de apoyos explícitos al acuerdo con los populares.
En su informe, que contó con el apoyo de casi el 96% de los 1.153 compromisarios que asistieron al congreso de Sitges, Duran animó a la militancia a defender sin complejos un pacto (con el PP).
'Los objetivos, las utopías, hay que medirlos desde el realismo cuando se tienen responsabilidades de gobierno', afirmó, en referencia a las posturas nacionalistas radicales de ERC y que 'engañan' a algunos democristianos (básicamente las juventudes de la formación).
Frente a estas actitudes, Duran defendió un nacionalismo moderado implicado en el conjunto del estado español y reclamó un compromiso de España con Cataluña. 'No queremos ningún privilegio, pero sin el hecho nacional catalán, hoy no existirían las autonomías', dijo.
El sector crítico, que presentó una candidatura alternativa encabezada por Jordi Petit, quedó fuera de la nueva ejecutiva.
El congreso democristiano aprobó, por otra parte, someter sus militantes y cargos públicos a un código de conducta ético. Este código, avalado por el 99% de los compromisarios, insta a 'no aceptar corruptelas y ser austeros' en el desempeño de sus funciones. Se trata de una iniciativa incluida en la ponencia social defendida por el exconsejero de Trabajo Ignasi Farreras, dimitido de su cargo tras el escándalo Pallerols, relacionado con la presunta financiación irregular del partido mediante los fondos de formación.