La mejora de la confianza en los Doce apuntala el euro
La confianza de los empresarios de Francia mejoró en mayo por primera vez desde junio de 2001, lo que confirma la mejora de la coyuntura industrial del país, según publicó ayer el Instituto Nacional de Estadística y de Estudios Económicos (Insee). Este favorable comportamiento se une a los datos positivos publicados en Alemania, Italia y Bélgica, y ayudó a apuntalar el euro por encima de los 0,93 dólares.
La opinión de los empresarios galos sobre la evolución reciente de la economía también mejoró, mientras que las perspectivas de producción para los próximos tres meses son superiores a los de la media para un año.
Además mejoró la opinión sobre las existencias, aunque todavía está débil. El indicador de retorno del Insee, que indica si el clima coyuntural es favorable o no, confirmó la tendencia hacia la recuperación.
La confianza del sector industrial repuntó, debido sobre todo a la mejora del sector del automóvil. En bienes de equipo, la actividad ha mejorado sensiblemente en los últimos meses.
Según los analistas de Credit Suisse First Boston, los datos publicados por el Insee indican 'que mayo será un mes fuerte para la industria de la zona euro' y 'el BCE puede mostrarse cada vez más confiado en que la recuperación (de los Doce) ya está en marcha'.
Los expertos de Moody's destacaron que este informe 'aporta nuevas evidencias de que la mejora en la actividad doméstica de Francia se mantuvo al inicio del segundo trimestre de 2002'. Sin embargo, avisan que las señales llegadas desde Alemania aún son demasiado débiles como para concluir que habrá una recuperación firme del conjunto de la zona euro a finales de 2002.
También ayer se hicieron públicos datos de balanza por cuenta corriente en la zona euro que reflejan un superávit de 4.300 millones de euros en el primer trimestre (frente al déficit de 10.500 millones del mismo periodo del año anterior).
El saldo positivo se debió sobre todo al aumento del superávit en la balanza de bienes, que pasó de 5.500 a 21.100 millones de euros, y al descenso del 13% en el déficit de la balanza de rentas (que quedó en 7.900 millones de euros). Aumentó, sin embargo, el déficit de la balanza de servicios (que alcanzó los 6.300 millones de euros, un 26% más que en el primer trimestre de 2001) y el saldo negativo en la balanza de transferencias (2.600 millones de euros, 36% más).
La cuenta financiera, que junto con la cuenta corriente constituye la balanza de pagos, registró un déficit de 12.300 millones de euros, frente al superávit de 30.600 millones del primer trimestre de 2001 .
Teniendo en cuenta sólo el mes de marzo, la balanza por cuenta corriente de los Doce registró un superávit de 3.700 millones de euros, frente al déficit de 600 millones de euros de marzo de 2001.
Divisas y oro
El buen dato de confianza de Francia y la mejora de la balanza exterior de los Doce ayudaron a apuntalar al euro, que lleva semanas subiendo ante un dólar debilitado por la pérdida de confianza de los inversores en la sostenibilidad a largo plazo de los desequilibrios de la economía de EE UU.
El euro llegó a cotizar a 0,9330, muy cerca del nivel alcanzado tras los atentados terroristas del 11 de septiembre, y el BCE fijó el cambio oficial en 0,9320 dólares.
El oro, convertido en activo favorito de los inversores en un momento de creciente tensión entre India y Pakistán, alcanzó ayer los 327,05 dólares por onza, el nivel más alto desde octubre de 1997.
Mejora la inflación en Italia
El índice de precios de consumo (IPC) de Italia aumentó un 0,2% en mayo respecto al mes precedente, lo que rebaja la tasa interanual hasta el 2,3%, una décima menos que en abril, según una primera estimación difundida por el Instituto Nacional de Estadística (Istat). Las subidas más importantes en mayo se registraron en los transportes debido al alza del precio de los carburantes. También aumentaron un 0,5% los precios de los muebles, artículos y servicios para el hogar; un 0,4% los precios de los bares, hoteles y restaurantes, y un 0,3% los productos alimentarios y bebidas no alcohólicas, y la ropa y los zapatos.
En un año, los precios en el sector de bares, hoteles y restaurantes han experimentado el incremento más importante, del 4,3%, seguido de los productos alimentarios, que subieron un 4%. La rebaja más importante se ha producido en los servicios y gastos sanitarios, que cayeron un 1,1%, gracias a la reducción de los medicamentos.
El IPC calculado en términos armonizados con las estadísticas de la UE subió un 0,3% en mayo y un 2,4% en tasa interanual.