Carrefour aplica el exceso de tesorería al crecimiento del grupo en el exterior
Carrefour España logró durante 2001 un excedente de tesorería que provino sobre todo de la venta de los hipermercados y supermercados, como consecuencia de la fusión de Pryca y Continente, así como de la gestión del cobro a proveedores. Gran parte de este dinero fue a la matriz francesa para financiar la expansión del grupo en otros países. A 31 de diciembre había un saldo deudor a favor de la filial de 619,73 millones de euros. Carrefour España también financiará con esos excedentes la apertura de centros y la compra de cadenas.
La venta de los hipermercados y supermercados que Carrefour realizó durante el año pasado como consecuencia de la fusión de Pryca y Continente le generó un excedente de tesorería que la matriz ha utilizado en el desarrollo del grupo en otros países.
La multinacional de la distribución utiliza un sistema de compensación crediticia entre sus filiales para optimizar los activos financieros.
De este modo, Carrefour España cerró el ejercicio 2001 con un saldo a su favor de 619,73 millones de euros frente a los 374,3 millones de euros que contabilizó en el año anterior.
Parte de este exceso de tesorería se produce como consecuencia de la gestión de cobros y pagos a proveedores, aunque la diferencia entre el cierre de 2000 y el de 2001 se debe a las ventas de activos realizados durante el pasado ejercicio (las desinversiones impuestas por el Gobierno más algunas galerías comerciales, negocio de restauración).
Estas plusvalías ascendieron a 256,76 millones de euros, que aparecen recogidas en el epígrafe Beneficios en enajenación de inmovilizado de la cuenta de pérdidas y ganancias consolidada del ejercicio 2001.
Este dinero que la filial española deposita en el Centro de Coordinación de Carrefour (CCR) le genera unos intereses a tipos de mercado.
En estos movimientos que el grupo realiza entre sus filiales, Carrefour España recibió el año pasado un préstamo bancario de 170,5 millones de euros con vencimiento en 2006 y que devenga intereses referenciados al libor acordes con el mercado. Este préstamo que recibe y que luego deposita en el CCR forma parte de ese mecanismo de regularización de activos financieros de la multinacional.
Crecimiento en España
Por otra parte, la filial española también utilizará parte de ese excedente de tesorería que ha generado en su propio crecimiento, tanto a través de la apertura de establecimientos propios (hipermercados, supermercados, gasolineras, ópticas, centros de reparación rápida de vehículos, agencias de viaje y de seguros) como con la adquisición de otras cadenas locales que le pudieran ser de interés. 'Estamos abiertos a aumentar nuestro parque de tiendas a través de compras', señalan fuentes de la compañía.
Como consecuencia de la evolución registrada el año pasado, el consejo de administración de Carrefour España propondrá en la próxima junta de accionistas un reparto de dividendos de 151,9 millones de euros, lo que supone 0,45 euros por acción, frente a los 0,41 euros del año pasado.
De los 282,56 millones de beneficios, 127,98 se aplicarán a reservas voluntarias y 2,67 millones a reserva legal.
El resultado de explotación se situó en 269,5 millones de euros, un 4,8% menos que en 2000, por la caída de los márgenes comerciales y los menores ingresos procedentes de los negocios que se vendieron.
Estas desinversiones también propiciaron un retroceso en el volumen neto de ventas que se situó en 6.791,3 millones de euros, lo que significa un 1,4% menos que el año anterior.
En contrapartida, dichas operaciones y los extraordinarios de 134,2 millones de euros que generaron también tuvieron reflejo en el resultado neto consolidado atribuido a la sociedad dominante, que creció un 13,6%, hasta situarse en 370 millones de euros.
La compañía también se vio beneficiada por una menor tasa impositiva por las bonificaciones fiscales por reinversión de plusvalías. En cuanto al descenso de los márgenes, Carrefour explicó en su momento que se había producido por la decisión de bajar precios a los clientes finales.
Los costes de la cadena se redujeron ligeramente al representar el 19,1% de las ventas frente al 19,4% del año anterior. Esta disminución se concentró en las partidas de personal y amortizaciones derivados de las desinversiones, así como por la subcontratación de los servicios logísticos.
Carrefour España ha contabilizado gastos de 6,25 millones de euros por las indemnizaciones a los empleados con los que ha rescindido contratos, según consta en la memoria y el informe de auditoría depositado en la Comisión Nacional del Mercado de Valores.