Europa pone a Chile como modelo para los futuros pactos bilaterales
El acuerdo de libre comercio con Chile fue presentado ayer con entusiasmo por el presidente español, José María Aznar, como el gran éxito de la cumbre. El pacto fue valorado por los representantes comunitarios como el ejemplo a seguir para los acuerdos futuros, como el que se negocia con el Mercosur o al que aspiran la comunidad andina y centroamericana.
El pacto es el único avance constatable en materia económica de toda la cumbre. Sin embargo, ni siquiera está cerrado. El documento presentado es la firma de conclusión de las negociaciones. El portavoz de Pascal Lamy, comisario europeo de Comercio, Anthony Gooch, recordó que 'las dos partes deben ahora revisar los términos del acuerdo', aunque confía en que no haya 'sorpresas' en ese aspecto. Gooch espera que el acuerdo sea ratificado 'en breve' y entre a funcionar ya en enero del año próximo.
El presidente del Gobierno español, José María Aznar, situó el acuerdo con Chile por encima del firmado con México, que está en vigor desde julio de 2000. El dirigente español señaló que el acuerdo abre 'grandes oportunidades de inversiones en sectores industrial y de servicios', pero que también supone un paso 'trascendental' en la 'cooperación para la democracia y el desarrollo social'. El presidente chileno, Ricardo Lagos, lo valoró como 'la culminación de los sueños de 15 millones de chilenos'. En la línea marcada por la cumbre, el mandatario insistió en los aspectos de fortalecimiento de la democracia y los derechos humanos que el acuerdo trae consigo.