Los sindicatos anuncian huelga general el 20 de junio "si Aznar no lo remedia"
No obstante, explicaron que el Gobierno aún está a tiempo de evitar la huelga y para ello debe retirar su propuesta sobre la reforma del sistema de protección por desempleo y convocar una negociación para mejorar y aumentar las ayudas a los parados. Así, Fidalgo y Méndez se mostraron contundentes al anunciar, explícitamente y por primera vez, que el 20 de junio habrá una huelga general si el Gobierno no retira su propuesta.
Ambos dirigentes hicieron estas advertencias en una rueda de prensa en la que presentaron el "Resumen de propuestas para la mejora del empleo y la protección por desempleo", documento "recordatorio" de todas las aportaciones que los sindicatos han ido presentando a sucesivos ministros de Trabajo desde 1997 y que hasta el momento "han sido desatendidas", dijo Fidalgo.
El secretario general de CCOO explicó que las centrales no entregaron este documento en el Ministerio de Trabajo porque "no son aportaciones actuales", sino que se trata de unas demandas que el Gobierno conoce desde hace años y que "Aznar guarda en un cajón".
Tales reivindicaciones se resumen en la ampliación de la cobertura de la protección al desempleo, un aumento de la inversión en políticas activas y la mejora del "deplorable" funcionamiento de los servicios públicos de empleo (INEM), que sólo intermedian en el diecisiete por ciento de las ofertas y demandas, resumió Méndez.
De hecho, añadió, el Plan de Empleo del Gobierno reconoce que la protección de los parados no fomenta su permanencia en el paro, que el cuarenta por ciento de los desempleados no recibe ayudas, que el cincuenta por ciento de los que sí tienen prestaciones no las cobran más de cuatro meses, y que entre de los que tienen derecho a las ayudas del paro, sólo el quince por ciento agota el periodo de prestación. Además, los sindicatos quieren que se flexibilice el acceso al subsidio a quienes llevan más de un año en situación de desempleo, a los mayores de 45 años y a quienes tengan cargas familiares, propuestas antes las cuales el Gobierno responde con "recortes", criticó Fidalgo.
Méndez precisó que la intención de los sindicatos no es frenar la prepcarización del empleo que suponen las medidas que incluye en la reforma del desempleo, reformas que no tienen razón de ser después de que los agentes sociales suscribiesen el Acuerdo Interconfederal para la Negociación Colectiva de 2002 (AINC), que se firmó para avanzar en la convergencia europea y para dar prioridad al empleo. Sin embargo, aunque los sindicatos mantendrán los compromisos del AINC como la moderación salarial, Méndez aseguró que "de cara a una nueva negociación, el panorama ha variado de forma sustancial", en tanto que Fidalgo advirtió de que la ruptura del diálogo social puede afectar de "manera muy negativa" a las relaciones laborales en este país.