_
_
_
_
Gérard Chriqui

'Hay que gestionar con voluntad y humildad'

Gérard Chriqui, parisino de 48 años, confiesa que para dirigir una empresa, como la firma japonesa de cosmética Shiseido, es necesario respetar unos valores y a los clientes. No ha pasado por la universidad, pero asegura que ha aprendido de la vida

Llegó a España hace tres años sin hablar una palabra de castellano y se encuentra plenamente integrado. Gérard Chriqui, nacido en París hace 48 años, lleva ya una década trabajando para la firma japonesa de cosmética Shiseido, que acaba de cumplir 130 años. Su trayectoria profesional, labrada a base de saber escuchar y de aprender de los demás, se ha cimentado en varios sectores, como el de los productos médicos, la distribución, la alta perfumería y, ahora, la cosmética. Reconoce que es un hombre agradecido, y su apariencia así lo corrobora, con las oportunidades que le ha dado la vida.

Pregunta. Menuda aventura con 45 años, venir a España sin hablar castellano y ponerse al frente de un proyecto en un país desconocido para usted.

Respuesta. Ha sido una experiencia muy rica porque España es un país que me ha sorprendido gratamente por su gran diversidad, de cultura, comida y forma de ser de los españoles. Es muy agradable para vivir y trabajar. He descubierto que en España existe un espíritu de respeto al trabajo -se reacciona con una gran rapidez y eficacia- que podemos comparar con otros países. No me costó adaptarme porque siempre he tenido una gran voluntad para trabajar, para conseguir resultados cuando los objetivos han sido claros. Aquí trabajo mejor porque disfruto de la vida y me gusta trabajar en un buen ambiente. Cuando se construye ese entorno es un placer trabajar.

P. ¿Cómo se consigue crear ese ambiente de trabajo?

R. Fundamentalmente, con respeto. En la compañía trabajan 83 personas y para mí lo más importante es que todos se sientan responsables del área en el que trabajan y que se impregnen de la cultura de Shiseido, que tiene una historia de 130 años.

P. ¿Sobre que pilares se sostiene la cultura de Shiseido?

R. Es importante conocer el significado de nuestro nombre. Shi quiere decir recursos; sei, vida, y do, casa. Es decir, la casa que contribuye a mejorar la calidad de vida. Tratamos de complacer a nuestra clientela, nos preocupamos de la calidad del resultado y no de los medios. Todos hablamos un único lenguaje, el de la sinceridad. En esta casa damos rienda suelta a nuestras ideas y tenemos una inmensa gratitud y un gran compañerismo hacia nuestros consumidores.

P. Sin embargo, la cultura española es muy distinta de la japonesa.

R. Sí, pero en eso consiste el trabajo de los ejecutivos de esta empresa, en tener una actitud de cercanía y explicativa sobre el funcionamiento y la filosofía de la compañía. Damos mucha importancia al significado que encierra la empresa y sobre todo al investigación y a la innovación. Tenemos más de un millar de investigadores repartidos por todo el mundo investigando y aportando cosas nuevas a nuestros productos.

P. ¿Existen diferencias entre las consumidoras orientales y las occidentales?

R. No se trata de estatus social ni estilo de vida ni el tipo de piel. En Japón hay un mayor culto al bienestar. Por ejemplo, existe una variedad de tres o cuatro productos en función de la edad y del nivel social. En Japón, por ejemplo, las mujeres empiezan a maquillarse con 14 años, y a partir de ahí ya se empieza a consumir determinados productos adaptados a todas las edades. El mercado está mucho más segmentado. El peso del mercado en Europa es distinto al de Japón. Aquí el 55% de los ingresos proviene de las fragancias, el 27% de los tratamientos y el 18% corresponde al maquillaje. En Japón, las fragancias sólo se llevan el 2% de la cuota de mercado.

P. El sector en el que juegan, la alta cosmética, está sometido a una gran competencia, ¿cómo se gobierna una empresa sometida a este tipo de tensión?

R. Es importante saber cuáles son nuestra fuerzas. El mercado se ha vuelto tan competitivo y todos competimos a nivel global. Se ha convertido en una lucha permanente para conseguir cuota de mercado, a través de la calidad, la imagen y el servicio. No podemos pretender ganar cuota de mercado sin respetar todo eso. A nosotros nos respaldan muchos años de trabajo y de saber hacer las cosas. Nuestro objetivo es construir las bases para un desarrollo regular de la marca. Nuestro ejecutivos en Japón han pasado por España para saber cómo funciona el mercado. Japón recibe el flujo de otros países y viceversa. Lo importante, además de la gestión de una empresa, es saber comunicar.

P. ¿Qué cualidades ha de tener un ejecutivo para ser competitivo?

R. Es importante tener objetivos claros y a largo plazo. Otro dato que es decisivo para conseguir resultados es estar cerca de los equipos de profesionales. Hay que gestionar el día a día sin perder de vista el largo plazo.

P. Usted reconoce no tener carrera universitaria, un dato atípico entre los altos ejecutivos.

R. No es necesario tener estudios universitarios ni másteres para poder dirigir una empresa. Se aprende sobre el terreno. Hay que saber escuchar y estar dispuesto a aprender cada día de todos los que nos rodean. Tenemos que tener capacidad para preguntar y escuchar. No he realizado estudios universitarios, pero no me ha hecho falta. Me ha gustado siempre competir y ejercitar la memoria, pero además he aprovechado la experiencia de los demás para enriquecerme culturalmente y para tener mi propia filosofía.

P. Tiene usted una gran voluntad.

R. Es lo que necesitamos, más que inteligencia. Hay que gestionar con voluntad y humildad, de esta manera se pueden conseguir y aprender muchas cosas. Tengo interés por todo en la vida, no desprecio nada; la comida, el vino, el deporte. Se puede aprender y disfrutar de todo en esta vida.

Archivado En

_
_