Las pérdidas afectan a un tercio del patrimonio
La rentabilidad media del ahorro invertido en los fondos de inversión presenta a estas alturas del año un balance bastante deprimente o, lo que es lo mismo, negativo cuando se expresa en cifras. Los poco más de 178.700 millones de euros de patrimonio conjunto de los fondos, equivalentes a 29,7 billones de pesetas, están en negativo o con ganancias muy poco interesantes, salvo una reducida selección de entidades.
Sólo 150 fondos de inversión presentan rendimientos acumulados en lo que va de año (cuatro meses) superiores al 3% y el patrimonio afectado por pérdidas supera ligeramente los 10 billones de pesetas, equivalentes a un tercio del ahorro total colocado en estos instrumentos de ahorro. De los fondos que ganan, apenas son 28 los que logran superar la barrera del 10% y todos ellos tienen un carácter bastante minoritario.
Los mercados bursátiles siguen sin reaccionar al alza como esperaban y pronosticaban los analistas, convencidos de que la incipiente recuperación de la economía va a beneficias a las Bolsas de todo el mundo. Por contra, los fondos de renta variable han cerrado la semana pasada con pérdidas acumuladas que, en el caso de los fondos que invierten en la Bolsa española, rozan el 3%. Un centenar de fondos de inversión presenta a estas alturas del año pérdidas que superan al menos el 10%. El balance entre los que ganan y los que pierden es, por lo tanto, bastante desfavorable y se inclina del lado de los perdedores.
La caída del dólar
La negativa trayectoria de las rentabilidades tiene en la Bolsa uno de sus motivos principales, aunque no el único. Uno de los factores que más está influyendo durante las últimas semanas en la moderación de las rentabilidades, en especial en los fondos de renta fija, es la etapa de debilidad que está afectando al dólar. El dólar está viviendo este año una tendencia justamente inversa a la de los tres años anteriores. En lo que va de año, su valor frente al euro se ha depreciado en torno a un 2%, situación que no se conocía desde el inicio de la Unión Monetaria, en el año 1999.
En los tres años primeros de vida del euro, los fondos con inversiones en dólares han tenido una placentera existencia ya que sus rentabilidades, expresadas en euros, presentaban cada año ganancias que oscilaban en torno o por encima del 10% anual., ganancias insólitas en los fondos de renta fija.
Pero este año la situación se ha dado la vuelta, en buena medida como consecuencia de la erosión que ha producido en el valor de la divisa americana la serie de once recortes de tipos de interés oficiales que ha afrontado aquel país.
Como consecuencia de ello y de algunos otros factores, un amplio abanico de fondos de inversión españoles está encajando pérdidas de cuantía creciente, en especial durante las últimas semanas.
La depreciación del dólar frente al euro, que podría intensificarse en los próximos meses, está perjudicando por igual a los fondos de renta fija y de renta variable que actúan en el área del dólar, aunque se nota mucho más en los fondos de renta fija ya que las nulas o escasas rentabilidades de los activos que estos fondos tienen en cartera ha dejado en manos del tipo de cambio la única esperanza de rentabilidad. El pasado año, muchos fondos de renta fija internacional ganaron sólo gracias a las diferencias positivas por tipo de cambio, a pesar de las pérdidas que encajaron las cotizaciones de los activos de renta fija.
Otro de los frenos que han padecido los fondos de inversión en las últimas jornadas ha sido el fuerte deterioro del valor de las compañías tecnológicas, que tienen una elevada representación en el segmento de la renta variable española debido al elevado número de fondos de este tipo que salieron al mercado a lo largo del año 2000.
Los fondos tecnológicos han perdido en el curso de la semana pasada más de un 5% de su valor en la mayoría de los casos, llegando algunos a superar la barrera del 6% de pérdida semanal. La tecnología no acaba de remontar a pesar de las bajas valoraciones a las que han llegado la mayoría de los fondos de este tipo. Esta semana se han visto involucrados en el deterioro de las cotizaciones de las compañías del sector de las telecomunicaciones, que han alejado un poco más la expectativa de recuperación.